Al menos 19 personas perdieron la vida y más de 100 resultaron heridas debido al descarrilamiento de dos vagones de un tren de pasajeros ocurrido poco después de la medianoche del lunes al sur de El Cairo, dijeron las autoridades.
El accidente tuvo lugar menos de dos semanas después del nombramiento de un nuevo ministro de transporte para que reforme el sistema ferroviario y apenas dos meses después de una colisión entre un tren y un autobús escolar en la que murieron numerosas personas.
Autoridades del ministerio de Salud, citadas por la agencia noticiosa oficial MENA, dijeron que los 107 heridos fueron enviados a hospitales cerca del lugar donde ocurrió el descarrilamiento en el sector de Badrasheen, en Giza. Es previsible un aumento en el número de víctimas fatales, dijeron las autoridades.
El diario estatal Ahram dijo en su página digital que el tren de 12 vagones transportaba a mil 328 soldados conscriptos que se dirigían desde Assiut al norte, hasta El Cairo.
Uno de los sobrevivientes, Roy Hamad Gaafar, dijo que los últimos dos vagones se desprendieron del resto y se descarrilaron.
“Vi en las vías desperdigadas partes mutiladas de los cadáveres de mis compañeros”, dijo Gaafar.
En las imágenes difundidas por los canales de la televisión egipcia se veía a residentes provistos de linternas que participaban en las acciones de recate para alcanzar a quienes estaban heridos y atrapados entre los hierros retorcidos.
El 6 de enero, el presidente Mohammed Morsi nombró a un nuevo ministro de Transporte miembro del grupo de la hermandad Musulmana a la que pertenece en un intento por mejorar la seguridad en el sistema ferroviario.
El puesto quedó vacante desde el accidente ferroviario ocurrido en noviembre en el que perdieron la vida 49 menores que se dirigían a su jardín de niños. Un tren arrolló el autobús en el que iban los niños.