PEKÍN. La japonesa Toyota recuperó en 2012 el puesto de primer fabricante de autos del mundo, con 9.7 millones de vehículos vendidos, superando de nuevo a la estadunidense General Motors y a la alemana Volkswagen, adelantó la prensa.
Los tres grandes jugadores mundial del automóvil aumentaron sus ventas en 2012, gracias a la demanda de países emergentes como China, el primer mercado mundial de autos.
Toyota, que los últimos años se vio afectado por escándalos vinculados a defectos de fábrica en sus vehículos, y a los problemas de suministro por el terremoto y tsunami de 2011, recuperó la primera posición mundial, que tuvo en 2008 y 2010.
General Motors vendió en 2012 en total 9.29 millones de vehículos (2.9 por ciento anual de crecimiento), mientras que Volkswagen vendió 9.07 millones (alza de 11 por ciento), según lo anunciado por las empresas.
Aunque todavía no se conocen las cifras de Toyota, que a principios de año esperaba superar la barrera de los 10 millones, los analistas citados por la prensa japonesa no dudan que por lo menos anunciará ventas de 9.7 millones de autos, 22 por ciento más que en 2011.
Ello pese al impacto en sus ventas de la latente crisis diplomática chino-japonesa por el control de unas islas en el Mar del Este de China, lo que provocó según Toyota, que vendiera en China 200 mil vehículos menos de lo que había estimado, a causa del boicot de algunos consumidores chinos.
En septiembre las ventas de Toyota en China, primer mercado mundial de autos, cayeron 48.9 por ciento respecto al mismo mes de 2011, como consecuencia de este boicot.
Añadió que en consecuencia no alcanzará el objetivo de 10 millones de vehículos vendidos en 2012.
La crisis mundial ha provocado un descenso de las ventas de autos en buena parte del mundo desarrollado, sobre todo Europa y Estados Unidos, por lo que los constructores extranjeros han centrado su estrategia en aumentar sus capacidades productivas en China.
Los expertos pronostican un crecimiento anual cercano al ocho por ciento en el sector en China, donde el aumento de la población de clase media ha provocado una demanda creciente.