Una investigación de la Administración de Drogas y Narcóticos (DEA, por sus siglas en inglés) determinó que el narcotraficante mexicano, Joaquín El Chapo Guzmán, ayudó a ingresar un total de mil millones de dólares de mariguana a Estados Unidos.
La indagatoria revela que El Chapo apoyó a un grupo delictivo de Canadá y a una pandilla de motociclistas durante 10 años para introducir los narcóticos.
“Los narcóticos distribuidos por miembros de esta empresa criminal tenían un valor estimado de más de mil millones de dólares”, escribió el fiscal Steven Tiscione en documentos de la Corte.
La investigación detalla, además, que la red, integrada por el mexicano, la mafia canadiense y el grupo de motociclistas, era dirigida por el franco-canadiense Jimmy Cournoyer, quien llevaba un estilo de vida jet-set.
Cournoyer asistía junto con su novia-modelo a fiestas a las que alguna vez asistieron celebridades del cine, como Leonardo DiCaprio.
El New York Post difundió ayer la información, en la que precisa que la mariguana era transportada en camionetas y casas móviles a todo Canadá, con la ayuda de una pandilla de motociclistas denominada Hells Angels.
Posteriormente, la mafia de Montreal y el grupo motorizado traficaban la droga de Quebec hacia el norte de Nueva York.
Con el dinero que se generaba se le compraba cocaína a El Chapo Guzmán.
Después, con la venta de la cocaína se refinanciaba la operación de mariguana.
La cocaína comprada al narcotraficante mexicano era traficada hasta Canadá, donde era revendida.
El New York Post señala que una fracción de esas ganancias se destinaba a la red de tráfico que introducía la mariguana a la Gran Manzana.
La asociación delictiva fue desmantelada por autoridades de Estados Unidos y la Policía de la ciudad quebequense de Laval, donde habitaba el capo. Agencias