El atleta Noé Hernández falleció este miércoles producto de un problema cardiaco y a menos de un mes de ser baleado en un bar del Estado de México.
La la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y el ayuntamiento de Chimalhuacán, municipio del Estado de México, confirmaron el deceso veinte minutos después de ser ingresado inconsciente al medio día por sus familiares.
La madrugada del domingo 30 de diciembre pasado, Hernández fue baleado en el bar “La Reina”, ubicado en el municipio de Los Reyes La Paz, lo que le provocó la pérdida del ojo izquierdo y la visibilidad en el derecho. La semana pasada fue dado de alta, luego de que fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas en una clínica privada de Nezahualcóyotl.
Los agresores de “El Chivo”, como lo apodaban sus amigos, están libres. La Procuraduría General de Justicia del Estado de México difundieron su perfil ilustrado.
Su primera competencia internacional fue 1997, en Apodaca, Nuevo León, asistió al Campeonato Centroamericano en 1999 y a la Semana Internacional de la especialidad del mismo año. *Con información de EFE
Originario de Chimalhuacán, municipio del estado de México que forma parte de la zona metropolitana de la capital mexicana, Hernández nació el 15 de marzo de 1978 y empezó su carrera deportiva a los catorce años.
Hernández también fue cuarto en los Mundiales de Atletismo de París 2003 con 1 hora 18:14, el mejor tiempo en su carrera; dos años antes había sido descalificado en el Campeonato Mundial de Atletismo Edmonton 2001.
Hernández fue responsable del deporte en Chimalhuacán y al mismo tiempo secretario del deporte del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el estado de México.
En el 2002 ganó el campeonato mexicano con 1 hora 21:46 horas y concluyó cuarto en la Copa del Mundo de Torino, Italia (1h22:05) pero se ausentó de los Juegos Centroamericanos de San Salvador 2002.
En el 2003 fue cuarto lugar en La Coruña, España con 1 hora 20:53, decimonoveno en el Grand Prix de Tijuana 2004 y en la Semana Internacional de Marcha de Ciudad Victoria ganó su pase para Atenas 2004, donde fue descalificado.
El andarín se caracterizó por sus constates cambios de entrenador y tras una lesión de rodilla que lo mantuvo inactivo casi dos años intentó clasificar a los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
