El sheriff Joe Arpaio, del condado estadunidense de Maricopa en Arizona, afirmó hoy que él y sus agentes no van hacer cumplir las nuevas leyes de control de armas emitidas por el gobierno federal.

 

Durante una entrevista con el comentarista Mike Broomhead, de la estación de radio KFYI de Phoenix, Arpaio dijo que él juro defender la Constitución y no va a llevar a cabo políticas que van en contra de la Carta fundacional de Estados Unidos.

 

«Ahora, si ellos (el gobierno federal) van a decirle al sheriff que él va a ir por ahí recogiendo armas de fuego de todo el mundo, van a tener un problema», advirtió.

 

«Podría no hacer cumplir esa ley federal», enfatizó Arpaio.

 

Cuestionado sobre si daría instrucciones a sus agentes para confiscar cargadores de gran capacidad o armas de asalto si fueran ilegales bajo la ley federal, Arpaio respondió con un rotundo «no».

 

«Yo dije antes que voy a armar a todos mis agentes, hace un mes que dije eso, con armas automáticas y armas semi-automáticas», recordó el sheriff.

 

Subrayó: «Vamos a ser capaces de responder de nuevo (…) No me importa lo que digan en Washington».

 

Los comentarios de Arpaio reflejan un temor infundado entre muchos propietarios de armas de que el presidente Barack Obama intentará confiscar sus armas de fuego, con base en una serie de leyes más duras a raíz de la masacre de diciembre pasado en una escuela de Connecticut.

 

Entre las medidas que se analizan, se incluye el restablecimiento de un proyecto de prohibición de armas de asalto y cargadores que tengan capacidad para más de 10 tiros.

 

Arpaio, quien a sus 80 años de edad fue reelecto en noviembre pasado por sexta ocasión, es conocido en todo el país por su posición antiinmigrante, lo que le ha valido ser el blanco de demandas federales por supuesta discriminación racial contra los hispanos.

 

En la entrevista, Arpaio dijo que continuará «haciendo cumplir todas las leyes, incluida la de inmigración ilegal».