La familia del exandarín mexicano Noé Hernández, quien falleció el 17 de enero pasado, debido a un paro cardiorespiratorio, recibió el apoyo que el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila.

 

A la entrega acudieron la esposa del medallista olímpico en Sydney 2000, Vianey Pedraza, quien estuvo acompañada por sus dos hijas Vanya y Vianey, además de algunos integrantes de la familia, quienes vieron con satisfacción que la esposa de Noé Hernández no estará desamparada en lo económico.

 

De igual manera, el mandatario estatal dio a conocer que la beca que recibía el ex atleta de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), su gobierno lo asumirá para beneficio de la familia.

 

Ávila Villegas recordó que el exmarchista siempre mostró garra y determinación en cada una de las acciones emprendidas durante su carrera como deportista y desde luego en los cargos ocupados hasta antes de su fallecimiento.

 

En esta ceremonia también se aprovechó para hacer un homenaje luctuoso al exmarchista mexicano.

 

El medallista olímpico murió a los 34 años de edad en el hospital general de Chimalhuacán a raíz de un ataque que recibió el último fin de semana del 2012 en un bar del municipio Los Reyes La Paz,  al oriente del Distrito Federal y a unos 100 kilómetros de la ciudad de Puebla.

 

El estado ha registrado en los últimos días decenas de asesinatos, por lo que a partir de esta semana elementos de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Marina, así como de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) del estado, realizan un operativo con 20 filtros de revisión en el Valle de Toluca y también en Ecatepec de Morelos.

 

La SSC informó que en estos puntos se hacen revisiones, principalmente para detectar vehículos robados, armas y narcóticos.

 

Los filtros se encuentran instalados en los principales accesos a los municipios del Valle de Toluca, como la calzada Pacífico, en el entronque de los municipios de Temascaltepec y Sulpetec; en la carretera Toluca-Atlacomulco; el bulevar Aeropuerto, en Xonacatlán, así como las autopistas México-Toluca e Ixtapan de la Sal.

 

Hasta el momento no se reportan incidentes en estos retenes que se instalaron ante el incremento de la ola de violencia que se registró durante las primeras semanas de este año en el Valle de Toluca.