El león no es como lo pintan, dice el refrán. Tanya Müller García es una muestra de ello.

 

Su llegada al gabinete de Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno del Distrito Federal, fue sorpresiva y acompañada del misterio de un vínculo familiar con Andrés Manuel López Obrador.

 

La relación surge por el apellido Müller, similar al de la esposa del tabasqueño, Beatriz Gutiérrez Müller. Antes de despejar la incógnita, la secretaria de Medio Ambiente de la Ciudad de México ríe. La risa no es de nervios. Sentada en la sala de trabajos de su nuevo despacho, en el Antiguo Palacio de Ayuntamiento, Müller advierte que no tiene ningún lazo familiar con el ex candidato presidencial de las izquierdas y ex gobernante de la capital del país.

 

Pese a ser uno de los rostros nuevos para la ciudadanía, la ambientalista cuenta con una trayectoria política, quizá fugaz, pero de relevancia en el PRD, partido en el gobierno desde 1997.

 

En la última elección de consejeros nacionales del partido, que terminó en una batalla campal entre las diversas corrientes, alcanzó un espacio dentro de los 45 consejeros nacionales perredistas.

 

Joven, elegante, a sus 38 años de edad, la ingeniera en Agronomía afirma que ya no es consejera del PRD, pero se reafiliará a ese partido.

 

¿QUÉ PARENTESCO TIENE CON ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR?

 

 

Ninguno.

 

¿CON SU ESPOSA? 

 

 

Tampoco. Absolutamente.

 

ES CONSEJERA NACIONAL DEL PRD…

 

Fui, es un cargo de dos años.

 

¿SE VA A REAFILIAR AL PRD?

 

 

Sí, es un partido con el que yo comulgo.

 

¿CON QUÉ CORRIENTE?

 

Sin corriente.

 

TUVO UN RESPALDO DEL GRUPO DE MARCELO EBRARD PARA SER CONSEJERA…

 

Sí…

 

¿SE MANTIENE EN ESA LÍNEA?

 

No, ahorita estoy trabajando en esta administración y estoy con el doctor Miguel Ángel Mancera. (Risas)

 

SIEMPRE HAY TIEMPO PARA HACER POLÍTICA…

 

Ahora me dedicaré a ser secretaria de Medio Ambiente y si ves mi trayectoria es totalmente ambiental-técnico, no es político, mi trayectoria no es política.

 

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Al mediodía del 5 de diciembre de 2012, Müller caminaba tras los pasos de Miguel Ángel Mancera en el patio principal de la sede del gobierno de la Ciudad de México. Trabajadores de la Secretaría del Medio Ambiente del DF que observaron la escena, no dudaron en pensar que seguiría en la oficina del jefe de gobierno capitalino.

 

En 2011, se desempeñó como directora de Gestión Social del jefe de gobierno y aún hay quienes la recuerdan por pasar en bicicleta por su ex jefe a sus oficinas de la Condesa.

 

La sorpresa vino al ser nombrada como sucesora de Martha Delgado, pero nadie pondría en duda su expertise en la materia.

 

De febrero de 2007 a 2011 encabezó la dirección de Reforestación Urbana, parques y ciclovías y de 2003 a 2005 había coordinado proyectos ambientales en la delegación Xochimilco, una de las zonas verdes de la ciudad.

 

Maestra en Ciencias Internacionales de la Cultura Urbana por la Universidad Humboldt de Berlín, Müller precisa que su lugar en el gabinete de Mancera se debe a que comparten la visión del desarrollo urbano sustentable.

 

¿FUE SORPRESIVA LA INVITACIÓN?

 

 

Ese es un tema que yo te pediría que lo enfocáramos a la gestión. Fue una invitación como se hizo a los demás miembros del gabinete.

 

Lo que sí comparte es la encomienda que le dio el jefe de Gobierno del DF desde el primer día en el cargo.

 

Trabajar en la movilidad sustentable, la calidad del aire, la protección al suelo de conservación, que es 50% del territorio de ciudad, y la recuperación de espacios y parques urbanos.

 

Aunque subraya que la conservación en la parte rural es una preocupación de los  ejidatarios para poder seguir en desarrollo sustentable “y contener la expansión de la mancha urbana”.

 

Al exponer los grandes retos de la ciudad en materia ambiental, la funcionaria no duda en señalar que la delegación Tlalpan es la zona prioritaria porque padece una fuerte invasión de asentamientos irregulares.

 

Müller, quien lleva casi un sexenio en el servicio público, hace un paréntesis y se coloca como una habitante más de la ciudad para señalar cuál es la deuda que tiene el gobierno de izquierda con los ciudadanos.

 

“El transporte público, de bicicletas, realmente es muy importante porque incide en nuestra calidad de vida, las horas que nos toma el trasladarnos de un punto a otro y eso es parte de lo que se extraña tal vez de otras ciudades, esa infraestructura en el transporte público y el aspecto verde es algo que todavía hay mucho por darle a la ciudad”.

 

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En la administración de Marcelo Ebrard, el desarrollo de autopistas urbanas y megaobras  a lo largo de las 16 delegaciones despertó un conflicto con la ciudadanía, pero principalmente con los grupos ambientalistas.

 

Esos conflictos, Tanya Müller los ve ya superados, y se ufana de que haya una sociedad activa.

 

“Es fundamental tener una ciudadanía muy activa y que se denuncie en temas de impacto ambiental”. Aunque aclara que en muchas ocasiones las denuncias son fuera de lugar porque las obras están en regla y la industria inmobiliaria se conduce con respeto a la legalidad.

 

“Tenemos que entender que somos una ciudad de 8.8 millones de habitantes y la demanda de vivienda es de 300 mil al año, porque la mayor parte de la población está en los 30 años, que es una edad muy productiva”.

 

La titular de Medio Ambiente en el DF explica que en el nuevo gobierno la ciudad entrará en una nueva dinámica y su crecimiento será de altura.

 

“Si vemos a las megaciudades son muy altas, pero la Ciudad de México como megaciudad es una de las más chaparras”.

 

¿HACIA DÓNDE VA LA CIUDAD?

 

 

Si tienes una ciudad compacta con usos de suelo combinadas, puedes caminar y hay transporte es una ciudad dinámica y equitativa.

 

Para Müller el plan está tan garantizado que se atreve a prometer que en seis años “entregaremos una ciudad con una mayor calidad de vida, más amigable, y que nos dé una mucho mayor competitividad en asuntos económicos”.

 

Sin embargo, admite que el reto será saber comunicar la importancia de desarrollar “verticalmente” la capital del país.

 

“El reto es comunicar por qué estás decisiones son la tendencia sustentable que tenemos que tomar. Son decisiones que nos convienen a todos”.