Andrés Manuel López Obrador aseguró que el proyecto del IFE para multar a la coalición Movimiento Progresista obedece a una estrategia de descalificación, pues alega que el órgano electoral contabilizó dinero de otras campañas electorales -de diputados y senadores- para perjudicarlo.

 

A través de un comunicado, el tabasqueño señaló que el gasto de su campaña presidencial ascendió a 233 millones 430 mil pesos, casi 100 millones de pesos menos que el límite de 336 millones 112 mil 84 pesos establecido en la ley.

 

“Es totalmente infundado como sostiene el IFE en su dictamen, que rebasé el tope de campaña establecido en la ley”, indicó López Obrador.

 

Explicó que antes de la campaña, los partidos PRD, PT y MC suscribieron un convenio de coalición en el cual acordaron destinar 50% del financiamiento público para gastos de la campaña presidencial, equivalente a 223 millones 451 mil pesos manejados en la cuenta número 70034671344 de Banamex.

 

De esta forma, el PRD aportó 112 millones 872 mil, el PT 59 millones 49 mil y el MC 51 millones 530 mil. Adicionalmente, el sol azteca aportó cinco millones más un pasivo de cuatro millones 979 mil pesos.

 

El tabasqueño negó tajante haber recibido recursos para su campaña a través de la organización civil Honestidad Valiente.

 

Por su parte, el presidente nacional de Morena, Martí Batres, consideró irónico multar a los partidos del Movimiento Progresista mientras el PRI utilizó aviones y helicópteros privados, se excedió en el uso de espectaculares y utilizó dinero de procedencia desconocida para la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto.

 

Consideró dolosa la postura del IFE y servil ante los intereses del gobierno, lo que significa un retroceso para el país.