Para evitar el uso de plantas y árboles en la producción de celulosa, Susan Lee ha desarrollado este bio-textil a partir de un cultivo bacteriano que emula la piel vacuna.
El tejido es una capa delgada de cultivo bacteriano que se realiza nada más y nada menos que en té verde muy endulzado; después de su producción es secado, cortado y modelado para producir las prendas que en su fase de acabado lucen como si fueran producidas en tercera dimensión.
El Bio-couture, como ha sido llamado por la creadora puede teñirse y tratarse fácilmente; fue presentado el pasado 23 de septiembre en la semana de la moda de Londres, Inglaterra con asombrosos resultados.
En combinación con diseños de alta costura, estas prendas ofrecen una alternativa más amigable con el ambiente por partida doble, además de evitar el consumo de plantas y árboles es completamente biodegradable.