El dimisionario primer ministro italiano Mario Monti manifestó hoy que en Europa se teme un regreso de Silvio Berlusconi al frente del gobierno de Italia.

 

En una entrevista con el canal de televisión TgCom24, Monti señaló que los socios comunitarios “ya han tenido bastante de una Italia que, con su fragilidad política, su incapacidad de decidir y la indisciplina financiera, puede ponerse en riesgo a la zona euro, a Europa y a sí misma”.

 

Sobre la evolución de la campaña electoral italiana de cara a las elecciones generales del 24 y 25 de febrero, lamentó que ha sido “insultado y agredido” y aseguró que ha intentado “no responder a los insultos”, aunque admitió que en algunas ocasiones se ha dejado llevar por la polémica.

 

Asimismo, arremetió contra el secretario del Partido Demócrata (PD), Pier Luigi Bersani, candidato del centroizquierda a las elecciones, por sus declaraciones en las que tachó de “victoria pírrica” el acuerdo alcanzado en Bruselas el viernes para los presupuestos de la Unión Europea para los próximos siete años.

 

Monti rechazó además la posibilidad de que la coalición que lidera pacte con el partido Izquierda, Ecología y Libertad (SEL), que se presenta junto a Bersani en los comicios, ya que considera que sus propuestas condenan “a los jóvenes al paro y a tener que emigrar” fuera de Italia.

 

Así, parece complicarse la posibilidad de una alianza postelectoral entre el centroizquierda y Monti, como sugirió Bersani en los últimos días, para hacer frente a Berlusconi y sus promesas populistas, como la devolución del importe pagado por los italianos por el Impuesto de Bienes Inmuebles a la primera casa, reintroducido por el Ejecutivo del excomisario europeo.

 

Monti también se refirió a la última polémica surgida en el seno de la coalición centrista que lidera ante los próximos comicios, ya que algunos de los candidatos que se presentan en su lista “Elección Cívica” han manifestado que en las elecciones regionales de Lombardía, que se celebran el mismo día que las generales, votarán la opción propuesta por el centroizquierda.

 

Los miembros de la formación de Monti han justificado su decisión de apoyar al candidato del centroizquierda porque dicen que se trata de un “voto útil”, con el fin de evitar que la partido separatista Liga Norte se imponga en los comicios regionales de Lombardía, cuya capital es Milán.

 

“No comparto la lógica del llamado voto útil -declaró Monti-. Espero que aquellos que voten a la lista ‘Elección Cívica’ (en las generales), en Lombardía voten a (Gabriele) Albertini”, su candidato.

 

Si la Liga Norte, que ya gobierna en las regiones norteñas del Veneto y el Piamonte, obtuviera el gobierno de la Lombardía, bajo su control quedarían tres de las regiones más ricas e industrializadas del país.