Morelia, Michoacán.- Las comisiones unidas Inspectora de la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) y de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública del Congreso local, admitieron que no cuentan con los datos suficientes para delinear a cabalidad una Cuenta Pública 2011, y, por lo tanto, señalar responsabilidades a los funcionarios que hayan promovido el endeudamiento que padece la entidad.

 

Cuando el perredista Leonel Godoy asumió el gobierno de Michoacán, en 2008, la deuda de Michoacán sobrepasaba los 200 millones. Cuatro años después, la entidad debía 16 mil 116.9 millones de pesos.

 

Los diputados locales dan los últimos ajustes al dictamen sobre el informe fiscalizador de la Cuenta Pública de 2011. Aseguraron que dichas auditorías son “insuficientes y deficientes, por lo que no podemos aprobar el informe de la Cuenta Pública”.

 

Asimismo, establecieron que constituye una omisión por parte de la ASM el no haberse apegado a la Ley de Fiscalización del estado ya reformada, por lo que “deja sin elementos al H. Congreso del Estado para aprobar el Informe” entregado a mediados del mes de noviembre al presidente de la Comisión Inspectora, Juan Carlos Orihuela Tello. Además, debió haberse entregado a principios de ese mes.

 

Orihuela Tello y los diputados priistas y del albiazul del Congreso local han señalado que este tipo de omisiones podría costar la destitución de José Luis López Salgado, titular de la ASM, además de que podría contratarse una auditoría externa ante la posible negación de López Salgado por ampliar la fiscalización a las dependencias de Leonel Godoy Rangel, áreas que los diputados requieran tras aprobar el dictamen en el Pleno del Congreso local.