El líder opositor, Alfredo Pérez Rubalcaba, no ha dudado en pedirle a Mariano Rajoy que se vaya. “Dimita”, le ha espetado, “porque es lo mejor para España y para los españoles”.

 

Después de que fuera revelado el escándalo de corrupción dentro del partido gobernante, el PP, en el que está presuntamente involucrado el jefe del gobierno español, se han sumado las voces para su dimisión y el reclamo por celebrar elecciones anticipadas para abrir un proceso constituyente.

 

Además, el líder del PSOE, Pérez Rubalcaba, propuso que para prevenir la corrupción que las empresas no puedan dar dinero a los partidos políticos y que las implicadas en casos de financiación irregular no puedan contratar con la administración.

 

Rubalcaba también propuso crear una unidad de asuntos internos del Estado compuesta por “hombres de negro incorruptibles” que puedan entrar por sorpresa en los despachos de los cargos públicos.

 

Como última medida señaló que la Audiencia Nacional sea la competente para investigar los casos de corrupción, para evitar que los procesos judiciales se alarguen y que haya sentencias “dispares” entre los diferentes tribunales.

 

Además de desgranar sus planes contra la corrupción, Rubalcaba emplazó al jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, a desvelar las cuentas del PP de los últimos 20 años, al considerar insuficiente que informe de sus emolumentos personales, de los que dijo con ironía: “Madre del cielo, no le ha ido mal en estos añitos”.

 

En un clima social y político marcado por la publicación de numerosos casos de corrupción, el pasado 9 de febrero Mariano Rajoy hizo públicos sus datos fiscales un día después de que el PP hiciera públicas en su página web sus cuentas nacionales desde el año 2008 a 2011.

 

Con esa publicación, los populares cumplían uno de los compromisos adquiridos tras estallar el llamado “caso Bárcenas”, la publicación de una supuesta contabilidad manuscrita de quien fuera tesorero del PP y tras aparecer en los medios informaciones sobre supuestos pagos en dinero negro a dirigentes del partido, que Rajoy ha desmentido.

 

Desde entonces, tanto Rajoy como otros miembros de su partido demandan la misma transparencia al resto de formaciones políticas y especialmente al PSOE, principal partido de la oposición

 

Con información de EFE y El Mundo