La Auditoría Superior de la Federación determinó que los programas de la Secretaría de Desarrollo Social fueron incapaces de resolver las necesidades de alimento y vivienda de la población beneficiada durante 2011, debido a errores de implementación.
De acuerdo con la Auditoría de Desempeño 11-0-20G00-07-0441, el órgano fiscalizador determinó que en 2011 el desempeño de la Coordinación Nacional del Programa de Desarrollo Humano Oportunidades “no cumplió con las disposiciones normativas aplicables al Programa de Apoyo Alimentario de contribuir al desarrollo de las capacidades básicas de los beneficiarios, mediante la realización de acciones para mejorar su alimentación y nutrición”.
Esto, debido a que la coordinación de Oportunidades no entregó los apoyos en especie a las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia; no cuantificó el total de niños menores de cinco años a los que debió entregar ese tipo de apoyos; no contó con mecanismos de control interno para monitorear la caducidad de los complementos alimenticios, ni las acciones a cargo de Diconsa para el control eficaz de la entrega de los apoyos en especie, lo cual originó que en ese año caducaran 18 mil 771 sobres de complementos nutricionales y de leche fortificada.
En el primer trimestre no entregó los apoyos monetarios del programa a 215 mil familias, el 31.9% de las 674 mil familias que estaban en el padrón de beneficiarios del Programa de Apoyo Alimentario, además de que en el 40.8% de las 50 mil 792 localidades atendidas por dicho programa también operó Oportunidades de manera simultánea.
En lo referente a la Auditoría de Desempeño 11-0-20100-07-0485 realizada al Programa para el Desarrollo de Zonas Prioritarias, la ASF señala que la implementación de dicho programa orientado en mejorar las condiciones de vivienda no logró acreditar “su contribución en la reducción de las desigualdades regionales”.
El informe señala que no existe evidencia suficiente para constatar que las 8 mil 260 acciones de vivienda en beneficio de habitantes de localidades de marginación media, baja y muy baja se efectuaran en beneficio de habitantes que presentaron condiciones de pobreza, rezago social o marginación.
Otros factores que contribuyeron a la inefectividad del programa fueron la falta de cuantificación de las necesidades de vivienda; la duplicidad de las obras y acciones con las de 17 programas que operan en regiones de marginación; la falta de especificación del tipo de acción que se realizó con los apoyos para casos de contingencia; la falta de indicadores para evaluar la cobertura del programa y la insuficiente rendición de cuentas sobre el cumplimiento de los objetivos general y específico del programa.