Una vez @Margo_Glantz dijo en una entrevista que su escritura transcurre “lanzando una mirada cuidadosa y fragmentada sobre el cuerpo, en especial el femenino, tanto en la escritura crítica como en la creativa”. Viajera incurable, en Coronada de moscas escribe sus vivencias sobre la India, país que, dice, la cambió: “Esa transfiguración incluye gran violencia, gran crueldad. Experiencia de la miseria, la suciedad, la enfermedad. Y al mismo tiempo de la belleza más extrema”. Tiene una larga lista de publicaciones; su trabajo transcurre entre la academia y la escritura, pasando por el rigor del ensayo. En la red social del pájaro azul dice que no tuitea, sino haikukea. Tiene 11 mil 180 followers hasta el momento y sus aportes son para presumir con un RT.
No sé si la depresión impide hacer la cama o no hacerla produce la depresión.
¿Será el tuit un registro de lo infraordinario?
Acepto autocríticas para documentar mi narcisismo.
Nada se parece más al pensamiento mítico que la ideología política.
Cada vez que abro el periódico o el tuit, una nueva ciudad mexicana se vuelve la más peligrosa del mundo.
Confirmado: un meteorito acabó con los dinosaurios, necesitamos otro.