CIUDAD DEL VATICANO. El Papa Benedicto XVI aseguró que su renuncia no significa que abandona a la Iglesia católica, sino que la seguirá sirviendo con una labor más propia de su avanzada edad.

 

El obispo de Roma hizo esta declaración durante su último mensaje dominical y bendición con el Angelus de su pontificado, ante más de 100 mil personas que abarrotaron la Plaza de San Pedro del Vaticano.

 

En su discurso recordó el pasaje bíblico de la transfiguración, en el cual Cristo le pide a algunos de sus apóstoles que lo acompañen a orar sobre el monte Tabor y ante ellos manifiesta su luminosidad divina.

 

Afirmó que ese texto lo siente dirigido a él en este momento de su vida.

 

“El Señor me llama a subir el monte, a dedicarme aún más a la oración y a la meditación. Pero esto no significa abandonar a la Iglesia, al contrario, si Dios me pide esto es justamente para que pueda seguir sirviéndola con la misma dedicación y amor como lo he hecho hasta ahora”, dijo.

 

“Pero de modo más congruente con mi edad y con mis fuerzas. Invoquemos la intercesión de la Virgen María: ella nos ayude a seguir siempre a Cristo, en la oración y en la caridad”, agregó.

 

Luego, durante sus saludos en varios idiomas, agradeció a todos por las “tantas expresiones de gratitud, de afecto y de cercanía” recibidas en estos días, con motivo de su anunciada renuncia.

 

El próximo jueves 28 de febrero, a las 20:00 horas locales (19:00 GMT) entrará en vigor la dimisión de Benedicto XVI y en ese momento dejará de ser Papa. (Notimex)