Petróleos Mexicanos (Pemex) invertirá este año tres mil millones de pesos para la industria del gas shale, un combustible que la paraestatal considera importante para el futuro de la economía mexicana.
“Los proyectos de shale son la masificación, esa es la palabra. Tiene que ser masivo”, dijo Carlos Morales Gil, director general de Pemex Exploración y Producción, en el marco del encuentro Mexico Energy Summit.
México tiene reservas de gas shale valuadas en 60 mil millones barriles, explicó el directivo, pero actualmente sólo produce 400 barriles diarios, debido a los importantes costos que requiere la extracción de ese gas.
Morales Gil afirmó que actualmente la perforación de pozos de gas shale cuesta siete millones de dólares, pero para que se reduzca el costo, Pemex deberá perforar miles de pozos.
“La inversión no es para esos 400 barriles. La inversión es para confirmar la existencia de los 60 mil millones de barriles. Esos pozos nos están costando hoy siete millones de dólares. Veníamos del orden de 20 millones, ahora estamos en siete millones. La única manera de llegar a que nos cueste cinco millones es haciendo muchísimos pozos, miles de pozos”, dijo tras su conferencia.
Las reservas de gas shale en México se encuentran en el noreste y el este del país, es decir, en Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y Veracruz. Pemex lo divide en cinco regiones: Chihuahua, Sabinas-Burro-Picachos, Burgos, Tampico-Misantla y Veracruz.
El gobierno estima que para que la producción llegue a ser rentable, Morales Gil cree que se necesita la perforación de más de 10 mil pozos.
“Entonces dependiendo de la velocidad en la que creamos avanzarle, hablamos de la perforación de más de mil pozos por año”, precisó.
Para que se logre esa meta, el directivo señaló que es necesario modernizar la paraestatal, aunque no quiso dar detalles sobre la manera que debe ser reformada la petrolera.
“En mi opinión, tenemos que evolucionar, no tenemos por qué ser atados a atavismos históricos. Los mexicanos tendrán que decir el futuro de esa iniciativa. ¿Si para el país es benéfico acelerar el ritmo de desarrollo? Sin duda. Si para acelerar el ritmo de desarrollo es necesario que se le permita a Pemex tener alianzas, hay que hacer eso. Si para acelerarlo hay que hacer más contratos incentivados, hay que hacerlo. Lo que debe prevalecer es el beneficio de los dueños”, expresó.
En entrevista con 24 HORAS, David Shields, consultor en asuntos energéticos, dijo que más allá de una reforma energética que necesita México, el país debe regular la producción y extracción del gas shale, específicamente, debido a los riesgos ambientales que puede causar.
“Todo es cuestión de regulación. Si se va a hacer, creo que podría dar lugar a un desarrollo muy desordenado y a diversos tipos de contaminación, sobre todo de los acuíferos. Todo es cuestión de tener una regulación muy estricta en cuanto a la explotación de estas capas de rocas o de estos yacimientos”, explicó.
“También hay que asegurar un ordenamiento urbano muy bien organizado porque se maneja muchas pipas y mucho movimiento de agua y luego van surgiendo poblados aquí y allá cerca de las explotaciones y hay que controlar eso”, agregó.