A 39 días de que se registrara la explosión en el edificio B2 del complejo administrativo de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la Ciudad de México, aún siguen internadas por diversas heridas siete personas.

 

La paraestatal informó mediante su cuenta de Twitter que hoy el trabajador Marco Antonio Sigler Rangel dejó el hospital de Picacho.

 

Hace unos días la empresa petrolera informó que tras la tragedia del 31 de enero, que dejó un saldo de 37 personas muertas, los hospitalizados se encuentran en calidad de delicados y ya ninguno se encuentra grave.

 

Apenas el viernes pasado el titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam refrendó la hipótesis de que una fuga de gas ocasionó la explosión en las oficinas administrativas de Pemex ubicadas en la capital mexicana.

 

Al salir de una reunión de más de dos horas con la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional realizada en el Senado de la República, Murillo Karam aseveró que “ya no falta mucho” para que se conozcan los resultados definitivos de la investigación pero omitió dar un plazo.

 

Aseguró que está claro que fue una acumulación de gas, pero aún falta por determinar “de dónde salió el gas y las responsabilidades”.