Brasilia.- El rechazo a las acciones del presidente Jair Bolsonaro frente al Covid-19 crece en Brasil, al registrarse esta noche el día 15 de cacerolazos contra el mandatario y enfrentar una denuncia de la oposición para removerlo de su cargo.
Las protestas sociales contra el presidente iniciaron el 17 de marzo y no se han detenido desde entonces; son convocadas generalmente a través de las redes sociales.
En las principales ciudades brasileñas, como esta capital, Sao Paulo, Río de Janeiro, Belo Horizonte, Recife, Florianápolis, Goiânia, Maceió y Natal, los habitantes hicieron ruido desde sus casas esta noche y gritaron “¡Fuera Bolsonaro!”.
Paralelamente, el mandatario dio su cuarto mensaje en cadena nacional sobre la pandemia.
Por primera vez, su discurso presentó un cambio de tono y dejó de criticar directamente el aislamiento social como medida de contención del brote, como hacía contrariando a las autoridades sanitarias del mundo, informó O Globo.
En la víspera, los principales partidos de la oposición en Brasil presentaron un recurso ante el Supremo Tribunal Federal para remover “inmediatamente” del poder a Bolsonaro.
En un comunicado, el Partido de los Trabajadores (PT), principal fuerza opositora en Brasil, dijo que presentó el recurso porque considera que Bolsonaro no está en condiciones de permanecer en el cargo “al incumplir las recomendaciones de organismos internacionales como la OMS y del propio Ministerio de Salud en el combate a la pandemia”.
Con este argumento, el PT y los partidos que se le sumaron sostienen que el presidente puso en peligro la vida de la población cuando salió a las calles de Brasilia el 29 de marzo y provocó aglomeraciones.
fahl