NACIONES UNIDAS. El papel clave de México en la aprobación del Tratado de Comercio de Armas (TCA) fue destacado hoy por el presidente de las negociaciones del histórico acuerdo de la ONU, Peter Woolcott, así como por miembros de grupos civiles.

 

«México ha sido un fuerte líder durante el proceso del acuerdo. No sólo ha emitido declaraciones conjuntas, sino su contribución en las negociaciones ha sido absolutamente enorme», dijo Woolcott, representante permanente de Australia ante Naciones Unidas (ONU).

 

Indicó que México dirigió mediante su negociador Roberto Dondisch el grupo de negociación sobre desvío de armas, tema que se incluyó en el acuerdo.

 

Destacó el papel histórico de México para regular las transferencias de armas convencionales en el mundo, señaló Woolcott, quien presidió la Conferencia del TCA, la cual comenzó el 18 de marzo pasado y concluyó 10 días más tarde.

 

«Entiendo que el tratado es muy importante para México, sin embrago, ese país hizo una contribución internacional en todo el proceso por muchos años, tanto en la parte final de las negociaciones como hoy (martes) en la Asamblea General», dijo Woolcott en entrevista.

 

El TCA, el primer acuerdo legalmente vinculante para regular la transferencia de armamento convencional en el mundo, fue aprobado este martes por 155 votos a favor, 22 abstenciones y 3 votos en contra de Corea del Norte, Siria e Irán.

 

El documento sienta las bases mínimas para detener las transferencias de armas a países en donde se cometan crímenes de guerra y de lesa humanidad, así como graves violaciones a los derechos humanos.

 

El jueves pasado, la ONU intentó aprobar por consenso el TCA, lo que no fue posible debido al rechazo del documento de los mismos tres países que en esta jornada votaron en contra.

 

En esa ocasión, México buscó que se aprobara el acuerdo al argumentar que «consenso no significa unanimidad» y que ningún país debe tener derecho de veto en negociaciones en las que participan todos los miembros de la ONU.

 

México fue además durante la Conferencia el país que patrocinó los encuentros de prensa de organismos civiles que promovían el TCA, y fue el que a principios de las negociaciones y este martes en la Asamblea General habló por casi un centenar de naciones.

 

«Este es solo el principio. El trabajo duro comienza ahora. Debemos garantizar la rápida entrada en vigor de este histórico tratado e implementarlo tan pronto como sea posible», declaró Dondisch en la Asamblea General a nombre de 98 países.

 

Por su parte, Jeff Abramson, consejero de políticas del organismo Control Arms, aseguró que México estuvo profundamente involucrado en el proceso de negociación.

 

«México estuvo en el centro del impulso progresista por lograr un TCA. Uno de sus negociadores estuvo en los grupos de trabajo y el país fue clave en mantener un tratado con estándares muy altos», enfatizó Abramson.