El gobierno de la entidad aseguró que quienes bloquean los accesos a la capital michoacana, toman casetas, carreteras y emprenden manifestaciones en diversos puntos de Michoacán, “no están ahí por voluntad, sino por temor a represalias de grupos de la delincuencia organizada”.

 

Tareas de inteligencia del Centro de Investigación Federal y Seguridad Nacional (Cisen) y de la Secretaría de Gobierno estiman que grupos civiles y organizaciones sociales, sufrieron amenazas.

 

Ante este panorama, revela un posicionamiento gubernamental, “se conminó a los manifestantes a que desistan” y emprendió de manera coordinada una intensa vigilancia por parte de las fuerzas de seguridad.

 

Aunque el reporte oficial si describe que se detectó a personas ingiriendo bebidas alcohólicas y hasta con equipos de radiocomunicación, se explica que “en ninguna de estas manifestaciones hay personas armadas”.

 

De acuerdo al parte oficial, la mayor parte de las escuelas de la entidad trabajaron con normalidad, salvo los planteles –alrededor de 752-, donde sus directivos consideraron conveniente suspender actividades.

 

Salvo en la región de tierra caliente, “el comercio operó con normalidad”, al igual que los poderes del estado, entre ellos el Congreso que sesionó sin incidentes.

 

Por lo que respecta al cierre de al menos 30 alcaldías, la administración pública estatal menciona que la suspensión de labores se originó como una medida de precaución y no por amenazas.

 

El gobierno, expresa el posicionamiento, “no desestima ningún amenaza, al contrario, atiende cada una de ellas para asegurarse que no generen riesgo. Sin embargo, la amenaza de bomba al mercado Independencia de la capital michoacana, fue falsa”.

 

Además se estableció que existe plena coordinación con las autoridades federales que están reforzando los esquemas de inteligencia para identificar a quienes han generado estas manifestaciones y se ha intensificado la comunicación entre órdenes de gobierno para proteger a la población.

 

Y establece: Al momento, no se ha presentado ningún incidente violento; no obstante la Secretaría de Gobierno está coordinando los trabajos con la Secretaría de Seguridad, la Procuraduría de Justicia y los cuerpos de Protección Civil. Además, las dependencias gubernamentales siguen trabajando con normalidad, entre ellas hospitales y todos los servicios públicos básicos.

 

El comunicado establece que “los gobiernos federal y estatal trabajan para que a la brevedad se normalicen las actividades en la entidad”.

 

Los reportes de la Secretaría de Seguridad Pública Federal que se integraron al informe del Cisen establecen que a las 15:50 se realizó la liberación de las casetas de la autopista Pátzcuaro-Uruapan y se reabrió la circulación en dicha zona.

 

Por ello, funcionarios de las secretarías de Gobernación federal y de Gobierno estatal confiaron en todas las vías de comunicación queden liberadas a la brevedad.