La calle Boylston, donde ocurrieron las explosiones en el maratón el pasado 15 de abril, se reabrió al público después de haber estado cerrada desde el atentado.
La calle Boylston, donde ocurrieron las explosiones en el maratón el pasado 15 de abril, se reabrió al público después de haber estado cerrada desde el atentado.