ABUDABI. El magnate Carlos Slim considera que la actual crisis financiera no es global sino que afecta a los países desarrollados, y aboga por aumentar la participación del sector privado para salir de la situación.
En una entrevista exclusiva a Efe junto con el estadounidense Bill Gates, Slim señaló que “muchos de los países desarrollados están en una crisis específica a causa de sus altos niveles de deuda y sus déficit fiscales”.
Sin embargo, el considerado hombre más rico del mundo recordó que hay que mirar también a otros países y mercados emergentes en regiones como Asia o el golfo Pérsico, “cuyos bancos están en buen estado y sus finanzas también”.
Ante esta “nueva sociedad y nueva civilización”, el empresario mexicano apostó por una mayor participación del sector privado “en todo”.
“Es necesario financiar las asociaciones público-privadas”, explicó Slim, quien presentó en Abu Dabi, dentro de la Cumbre Mundial sobre las Vacunas que se celebra esta semana, una aportación de cien millones de dólares a la iniciativa de Bill Gates para erradicar la polio por completo en un plazo de seis años.
“Estoy convencido de que nuestra preparación y nuestros recursos (de los empresarios) son muy importantes para ayudar a resolver los problemas sociales y otros que no son estrictamente los de nuestras compañías”, opinó.
Por ello, para Slim, los hombres de negocios pueden ser complementarios a los gobiernos, no sus sustitutos, ya que muchas veces los obstáculos que se afrontan son imposibles de resolver solo por una persona o un grupo.
“Cuando hablo de asociaciones público-privadas, no lo hago solo en referencia a inversiones con ánimo de lucro, sino también para solucionar problemas principalmente en los campos de la sanidad, la educación, el medioambiente, los derechos humanos o la nutrición”, dijo.
Gates destacó que en sus proyectos comunes con Slim, como el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) ubicado en México, siempre ha habido gobiernos asociados, y detalló que, en la campaña contra la polio, el 60% de la financiación proviene de los estados.
Al tiempo que reconoció la importancia de la contribución pública, defendió que “hay una creatividad y una singularidad que los filántropos pueden aportar a esta mezcla”.
En su papel de filántropo, Gates ha pasado a trabajar de forma más estrecha con los gobiernos, tanto de países ricos como en desarrollo, y a tener que aprender nuevas cosas, “aunque la idea básica de cómo funciona el sistema y qué tipo de innovaciones podrían cambiar las cosas es sorprendentemente común”.
Slim no dudó en resaltar una y otra vez la importancia del empresario como generador de puestos de trabajo, “ya que al final del día, es la única forma de sacar permanentemente a la gente de la pobreza”.
“En la fundación se intenta dar a la gente la base para que tenga salud y educación, de forma que tengan mejores oportunidades de encontrar un buen trabajo”, remarcó el propietario de Telmex y el Grupo Carso.