NUEVA YORK. Las autoridades de la ciudad iniciarán mañana la búsqueda de posibles restos humanos en el lugar donde la semana pasada apareció parte del alerón de un avión que podría pertenecer a uno de los aparatos del 11 de septiembre de 2001.
Así lo confirmó hoy a Efe una portavoz de la Oficina del Forense de Nueva York, quien precisó que las tareas de búsqueda de posibles restos óseos comenzarán a partir de las 08:00 horas en un edificio cerca de la llamada “zona cero”, en el sur de Manhattan.
El jefe de la policía, Raymond Kelly, confirmó hoy ante la prensa que los restos metálicos encontrados no pertenecen a un tren de aterrizaje como se informó inicialmente, sino a la parte de un alerón, después de las primeras investigaciones de un técnico de Boeing.
“Se cree que se trata de uno de los dos aviones destrozados el 11 de septiembre de 2001 pero todavía no se ha podido determinar de cuál de los dos”, dijo, por su parte, el portavoz de la policía, Paul Browne, en un comunicado.
Los restos fueron localizados por unos operarios en la parte trasera de un edificio que alberga un centro comunitario islámico que hace casi tres años fue objeto de una agria polémica en Nueva York por los planes para levantar en ese lugar una mezquita.
La policía acordonó la zona el viernes tras recibir una llamada de los propietarios del edificio, situado en el número 51 de la calle Park Place, después de que se encontraran restos metálicos en los que se ve con claridad un número de identificación de Boeing.
Las autoridades aseguraron este fin de semana que el fabricante Boeing ha confirmado que los restos localizados pertenecen a un avión Boeing 767, el tipo de aparato que los terroristas secuestraron el 11 de septiembre de 2001.
“Los restos del aparato no se moverán del lugar hasta que concluya todo el proceso, después de lo cual serán trasladados hasta un depósito de la policía”, detalló la semana pasada el departamento que dirige Kelly.
El 11 de septiembre de 2001 dos comandos terroristas de la red Al Qaeda secuestraron dos aviones comerciales Boeing 767, uno de American Airlines que estrellaron contra la Torre Norte, y otro de United Airlines que impactó contra la Torre Sur.
Los atentados terroristas dejaron casi 3 mil muertos, incluidos los fallecidos en el ataque contra el edificio del Pentágono, a las afueras de Washington, y otro avión secuestrado que se estrelló en el campo de Shanksville (Pensilvania).