WASHINGTON. Tres estudiantes universitarios -dos kazajos y un estadunidense-, compañeros del joven Dzhokhar Tsarnaev fueron acusados formalmente hoy de obstrucción a la justicia y mentir a la policía durante la investigación del atentado en Boston del pasado 15 de abril, indicaron ayer los investigadores federales.
Se trata de los kazajos Azamat Tazhayakov y Dias Kadyrbayev, ambos de 19 años, quienes habrían ayudado a Dzhokhar a deshacerse de un ordenador y una mochila; así como el ciudadano estadunidense Robel Phillipos, también de 19, acusado de mentir a las autoridades.
A los tres se les imputa el retiro, tras el atentado, de objetos del dormitorio de Dzhokhar Tsarnaev que compartían en la Universidad Massachusetts Dartmouth, lo que constituye obstrucción a la justicia. Hace unos días, Tazhayakov y Kadyrbayev fueron detenidos por problemas de visados en un complejo de apartamentos de New Bedford (Massachusetts). El periodista de CNN Carol Costello reportó que los estudiantes kazajos se presentaron en la corte con las manos esposadas y grilletes en los tobillos.
En tanto, el miércoles se conoció una encuesta que muestra que 70% de los estadunidenses apoya la pena de muerte para Dzhokhar Tsarnaev, acusado de ser el coautor de los atentados en Boston en caso de que sea condenado, según una encuesta que ayer difundieron la cadena ABC y el diario Washington Post. Otro 27% de los entrevistados se opone a la posibilidad de imponer la pena capital al joven de 19 años, mientras que 3 % prefiere no opinar al respecto.
Además, 74% de los estadunidenses está a favor de que el sospechoso sea juzgado en un tribunal federal y no en una corte militar. Dzhokhar, detenido después de que su hermano Tamerlán muriera en la operación policial tras el atentado, fue acusado el pasado 22 de abril por el gobierno de EU del uso de “armas de destrucción masiva” contra personas, lo que le expone a la pena de muerte o a cadena perpetua si es declarado culpable.
La ley establece que el joven no puede ser juzgado por una comisión militar porque es ciudadano estadunidense; pero algunos legisladores republicanos argumentan que Dzhokhar debió ser declarado “combatiente enemigo” para que lo interrogaran más a fondo antes de entrar en el sistema de justicia ordinario. La Casa Blanca ha defendido la decisión del Departamento de Justicia de permitir que una juez federal leyera sus derechos al joven tres días después de ser detenido.
Entre quienes apoyan la pena de muerte para el sospechoso, la población anglosajona es la que más la respalda, con 75% de ellos a favor; mientras que sólo un 52% de los afroamericanos quiere esa medida, contra el 43% que se opone. En cuanto a los hispanos, 62% está a favor de la pena capital en este caso y un 35% la rechaza. La encuesta se desarrolló entre el 24 y el 28 de abril entre mil adultos de todo el país, con un margen de error de más menos 3.5 puntos porcentuales.
En tanto, una juez federal en Boston dijo esta semana que, además de sus abogados de oficio, el superviviente de los hermanos Tsarnaev estará representado en el juicio por Judith Clarke, defensora experimentada en casos de pena de muerte. Entre los clientes de Clarke se encuentra Jared Loughner, acusado de asesinar a seis personas en el tiroteo de enero de 2011 en Tucson (Arizona), donde resultó herida la congresista demócrata Gabrielle Giffords. También figura Theodore J. Kaczynski, conocido como Unabomber por las bombas que envió a universidades, aerolíneas y otras empresas entre 1978 y 1995. EFE