En este espacio hemos hablado con anterioridad de que la creatividad del mexicano es reconocida a nivel internacional. Hemos dicho también que esa creatividad en términos de negocios se ha torcido por diversos factores,como la necesidad de subsistencia y sobrevivencia familiar, actos de corrupción y porque la ilegalidad resulta ser un negocio muy lucrativo en México.

 

El narcotráfico es la actividad ilegal más lucrativa en el país (seguramente también lo es a nivel regional y mundial). El comercio de vehículos robados ocupa el segundo lugar.

 

Todos los días se llevan a cabo robos de autos a nivel nacional y esto representa altas ganancias, ya que muchos de ellos son vendidos como autopartes o son usados en su mayoría por el crimen organizado, el cual requiere de un gran número de automóviles para llevar a cabo actividades como secuestros, ejecuciones, extorsiones.

 

De acuerdo con datos de Lo Jack, tecnología especializada en la recuperación de automóviles robados,cada tres minutos se roban un vehículo.

 

Esta tecnología ha recuperado en México más de 11 mil 100 vehículos con su infraestructura de radiofrecuencia diseñada única y exclusivamente para la localización de autos robados.

 

En lo que va del 2013 Lo Jack ha recibido el reporte de 200 unidades robadas por mes, similar al mismo periodo del año pasado.

 

De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), al primer trimestre del 2012 se robaron en México 73 mil 878 vehículos asegurados durante el sexenio anterior, 18 por ciento menos que en el 2011, con un total de 83 mil vehículos a nivel nacional.

 

El Estado de México sigue siendo el número uno en robo de automóviles, siendo los municipios de Ecatepec, Nezahualcóyotl, Naucalpan, Cuatitlán Izcalli y Tlalnepantla los que cuentan con un mayor número de incidencia, seguidos por el Distrito Federal en las delegaciones de Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Benito Juárez y Coyoacán. Y por último los estados de Jalisco, Michoacán y Morelos.

 

Los autos más robados son el Tsuru, la Urvan y la Estaquitas de Nissan; así como el Jetta y Bora de Volkswagen.

 

La sensación de impotencia que se tiene después de que uno es despojado de su vehículo es indescriptible y mucho más si es con violencia y además te llevan a pasear varias horas.

 

A pesar de las estadísticas y del contexto de inseguridad, uno de cada tres autos en el país tienen algún tipo de seguro o protección.

 

La tecnología de radiofrecuencia de Lo Jack debería ser un valor agregado para servicios colaterales, por ejemplo los seguros contra robos de automóviles.

 

Y es que si existe en el mercado una solución que combate eficazmente el robo de automóviles y además se convierte en factor inhibidor de este delito, las empresas aseguradoras deberían tomarlo en cuenta como un valor agregado orientado a ampliar la colocación de pólizas.

 

Además de resaltar el ahorro para el usuario si su vehículo  no es robado, porque aun con la mejor y más barata póliza de seguro, si te roban pierdes y pagas sin contar tiempo y trámites.

 

Los datos son muy reveladores si marcas como Volkswagen y Nissan son las más afectadas por el hampa, pero a la vez son un nítido caso de éxito de recuperación para Lo Jack

 

¿Por qué no considerar esta tecnología como un valor agregado a las pólizas de seguros?

 

Abarataría costos en primas y agregaría valor hacia una cultura de seguros, ¿O no cree usted?