La producción de crudo ya no está en declive; por el contrario, registra un crecimiento, asegura el director general de Petroleros Mexicanos, Emilio Lozoya Austin.

En la clausura de un seminario sobre la experiencia de Noruega en materia petrolera, que se llevó a cabo el miércoles en la Secretaría de Relaciones Exteriores, el funcionario señaló que el crecimiento se debe a una sustitución de reservas superior a 100%.

 

“Contra los pronósticos, la producción se mantiene estable desde 2009. Tenemos más de 30 años de producción potencial en reservas totales”, afirmó.

 

El titular de Pemex enumeró una serie de retos financieros, de restructuración, esquema de pensiones y de inversión a los que se enfrenta la empresa e indicó que si se atienden estos puntos, el país tendrá la oportunidad de generar más energía, más barata y más limpia.

 

“Si logramos una legislación favorable en la cual se amplíe la participación del sector privado bajo la rectoría del Estado, sin privatizar los yacimientos ni mucho menos el recurso energético, podría detonar el crecimiento de este país de una forma significativa”, expresó.

 

Lozoya comentó que los costos de la paraestatal en exploración y producción son competitivos, porque en los últimos años han tenido yacimientos relativamente fáciles de encontrar y explotar, pero subrayó que el petróleo fácil se acabó en el mundo.

 

Por otra parte, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó ayer que los precios de los contratos a futuro  del petróleo en los mercados internacionales registraron un comportamiento al alza.

 

El 8 de mayo la cotización del contrato a futuro del West Texas Intermediate (WTI) en la Bolsa de Nueva York para junio reportó un incremento semanal de 6.1% al ubicarse en 96.62 dólares por barril, mientras que el crudo Brent para el mismo mes se incrementó 4.4% en la Bolsa de Londres al colocarse en 104.34 dólares por barril.

 

Este aumento se explica principalmente a preocupaciones sobre la posible interrupción del suministro de crudo desde Medio Oriente, luego del ataque aéreo de Israel a Siria el pasado fin de semana y por la publicación de datos positivos del empleo en Estados Unidos, donde la tasa de desempleo mantiene una tendencia a la baja para ubicarse en 7.5%, el nivel más bajo en cuatro años.