Tres semanas antes de las elecciones presidenciales del 2012 en Francia, François Hollande, ahora presidente de ese país, aceptó que durante un año, un equipo cinematográfico filmara los primeros meses de su presencia en el Elíseo.
El resultado es el documental del cineasta Patrick Rotman, titulado Le pouvoir (El poder), que se estrenó el miércoles en 15 ciudades francesas.
La crítica ha calificado al filme como un retrato fiel, gris, monótono, a ratos gracioso y otras veces angustioso, de las bambalinas de un poder de otro tiempo y ejercido por un hombre incapaz de levantar la voz, siempre discreto y sereno.
El documental de 110 minutos, empieza el 15 de mayo con el traspaso de poderes y la salida de Sarkozy y Carla Bruni del palacio, y acaba en enero de este año, cuando arrecia la crisis económica y la popularidad de Hollande se hunde hasta cifras nunca vistas.
“El poder”, se rodó durante nueve meses en el Elíseo, en donde el presidente trabaja pero no vive, refleja, aseguran el aislamiento del jefe del Estado francés y de su joven equipo.