TEXAS. Un tornado devastó partes del norte de Texas, donde causó al menos seis muertos, decenas de heridos y dañó decenas de casas, informaron este jueves las autoridades.
La población más afectada por las tormentas de ayer miércoles por la noche fue Granbury, donde las autoridades dijeron que ocurrieron las muertes cuando el tornado de primavera arrasó dos vecindarios.
«Algunos fueron hallados dentro de casas. Algunos fueron encontrados alrededor de las casas», dijo Roger Deeds, alguacil del condado de Hood, quien informó la cifra de muertos durante una conferencia de prensa a la medianoche local.
Agregó que el total de decesos podría ascender a medida que equipos de rescate remueven los escombros de las casas destruidas.
Cerca de 50 personas fueron llevadas a un hospital de Granbury, donde 14 fueron atendidas por lesiones. Otras dos personas heridas debieron ser trasladadas a un hospital en Fort Worth, a unos 35 kilómetros al noreste, dijo Deeds.
Por su parte, Matt Zavadsky, portavoz de la firma de servicios médicos MedStar Mobile Healthcare dijo que 100 personas resultaron heridas. Su compañía envió tres ambulancias y un autobús médico de Fort Worth a Granbury.
Deeds expresó que las autoridades estaban tratando de saber el paradero de 14 personas, pues no estaba claro aún si estaban desaparecidas o si se alejaron de la zona por otros motivos.
Los más perjudicados fueron los vecindarios de Rancho Brazos Estates y De Cordova Ranch, en el extremo sur de la ciudad, a unos 65 kilómetros al suroeste de Dallas, donde viven unos ocho mil habitantes.
La misma tormenta generó otro tornado que según vigías, tenía un diámetro de kilómetro y medio. Ese tornado arrasó parte de Cleburne, donde residen unas 30 mil personas, a unos 25 kilómetros al sureste de Granbury.
No hubo informes de muertes por esa tormenta, dijo el alcalde de Cleburne Scott Cain. «Pero sí tenemos la posibilidad de que haya algunos lesionados». No tenía cifras aproximadas.
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