En tanto la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) se dispone a concluir la transmisión analógica de la televisión abierta en esta frontera, como la primera ciudad en América Latina, cuatro amparos colectivos concluyen que Tijuana aún no se encuentra preparada para este cambio.
Este martes, la Cofetel tiene listo un apagón analógico que dejará sin señal de televisión convencional a esta ciudad fronteriza, con lo cual principia la transición a la señal digital.
Según la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti) en Tijuana, serán alrededor de 200 mil hogares los identificados para recibir este servicio.
Sin embargo, el director general de la empresa Círculo de Negocios Estratégicos, Antonio Torres Olmos, consideró que Tijuana todavía no se encuentra preparada para “quedar desconectada y ya no recibir esta señal”.
Aseguró que luego de este martes, la empresa medirá el impacto que tendrá con la ciudadanía esta medida, con un análisis de percepción “para ver lo que sucede después del apagón, vamos a salir a medir en 60 colonias a recoger la percepción de la gente”.
Destacó que los testimoniales que recaben servirán para dar más soportes a los cuatro amparos interpuestos por un despacho de abogados ante el Tribunal de Distrito, en contra del llamado “apagón digital”.
Expuso que ya llevaron a cabo un estudio de percepción en 20 colonias establecidas en el plan, y observaron, en términos generales, que no existe congruencia con los puntos establecidos en la forma de distribución de los decodificadores de señal.
Estimó que estos puntos son indicadores “que nos arrojan de que Tijuana no está preparada todavía, los estudios deben de ser muy congruentes por los planes establecidos, además de que a mucha gente no le entregaron los aparatos”.
Explicó que según los estudios llevados a cabo por esta empresa, “observamos que hay más de siete colonias que no tienen nada que ver con el mercado objetivo de extrema pobreza, y son otros indicadores de que el proceso de distribución tuvo fallas”.
El abogado litigante, promotor de los amparos colectivos en contra del “apagón analógico”, Luis Miguel Krasovsky, resaltó que el acuerdo “carece de la debida motivación legislativa, lo que ha traído como consecuencia que las cosas se hagan mal”.
Refirió que esos ordenamientos legales tienen como común denominador que no mencionan a la gente, “nunca mencionan el efecto, de que les van a quitar la televisión, y eso es violatorio del derecho a la información y otros tratados internacionales”.
Además, expresó que una medida de esta naturaleza “es facultad exclusiva del Congreso, legislar en materia de Telecomunicación, una cosa es que la Cofetel tenga la administración del espectro, pero otra cosa es que desconecte a la gente”.
Manifestó que la próxima semana estarán solicitando la suspensión en los cuatro amparos, “por lo menos nos darán la suspensión provisional, y después la suspensión definitiva, son amparos contra el apagón analógico”.
El abogado expresó que será el INEGI, quien determine cuándo Tijuana se encontrará preparada para el “apagón”, pues la propia Ley señala que deberá de ser “una empresa reconocida y confiable la que lleve a cabo un censo para determinarlo”.