PARÍS. Dos hombres franceses contrajeron este miércoles matrimonio por primera vez en Montpellier ciudad al sur de Francia, en aplicación de la nueva ley que autoriza estas uniones entre personas del mismo sexo.
Bruno Boileau, de 30 años, y Vincent Autin, de 40, se dieron el sí ante la alcaldesa de la localidad, Hélène Mandroux, del Partido Socialista (PS) y el mismo del presidente francés, François Hollande, impulsor de la ley de matrimonio homosexual.
Mandroux destacó el momento histórico que significa este matrimonio entre personas del mismo sexo y aludió a los precedentes de España y Portugal en la autorización de este tipo de uniones.
Los novios, vestidos de traje fueron aplaudidos por los cerca de medio millar de invitados que asistieron al acto al entrar en la sala donde contrajeron matrimonio instantes después.
La ceremonia se celebró en la sede del Ayuntamiento de esta ciudad mediterránea, en medio de una gran atención de medios de comunicación, franceses e internacionales, y con fuerte vigilancia policial.
Al simbólico acto asistió también la portavoz del Gobierno francés y ministra de la familia, Najat Vallaud-Belkacem, aunque precisó que lo hacía a título personal.
La vigilancia policial, de hasta un centenar de agentes, fue ordenada por las autoridades en medio de la polémica que todavía rodea la ley, contra la que se manifestaron decenas de miles de personas el pasado domingo en París.
Esa nueva muestra de la oposición a la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo y que autoriza la adopción por parte de esas parejas, terminó con varios cientos de detenidos y desórdenes públicos en la capital francesa.