Después de fotografiar los rostros más famosos del mundo, desde Kate Moss hasta Madonna y desde Tony Blair hasta la reina Isabel II de Inglaterra, el escocés John Rankin Waddell, conocido simplemente como Rankin, ha enfocado su lente a personas con enfermedades terminales.
El desafío, la fortaleza y la vitalidad a la vista son notables, tal vez porque estamos más acostumbrados a la imagen estereotípica de la “víctima” de cáncer, explica el fotógrafo en entrevista con BBC Mundo.
“Eso fue una sorpresa para mí”, afirma Rankin. “Hay tanta gente que se ve tan saludable pero está realmente muy enferma”.
“Recuerdo que cuando fui a África a hacer algo para Oxfam, la gente deseaba ver a las víctimas. No me gusta mostrar víctimas. No, no creo que la fotografía debiera tratar de eso. Creo que la gente también está aburrida de eso. Pienso que están anestesiados”.
“Lo que me parece interesante es tratar de dar un salto y hacer que la gente le dé otro enfoque o lo reconsidere”.
La foto de Sandra Barber a quien se le diagnosticó un tumor cerebral, se encuentra ahora en la entrada de la Galería de Arte Walker en Liverpool, que alberga la exhibición de Rankin Alive: In the Face of Death (Vivo: en presencia de la muerte) inaugurada esta semana.
Ella explica que quería ponerse una máscara de pintura de guerra en la cara cada vez que iba a una sesión de quimioterapia. Acudir al tratamiento era como ir a una batalla.
“No deseaba ir tranquilamente como cualquier paciente de cáncer”, dice la mujer de 48 años, nacida en Suiza, “quería luchar contra él. Siempre sentí que tenía una fuerza interior que viene de otro lugar, de otra dimensión, y siento que estoy conectada a una tribu de guerreros”.
Entre los fotografiados se encuentran Martine Wright, la sobreviviente del atentado de 2005 en Londres convertida en deportista paralímpica, el sargento Johnson Beharry, herido en Irak, y el guitarrista Wilko Johnson, del grupo Doctor Feelgood, que sufre de cáncer pancreático.
Rankin, explica el portal de BBC Mundo, dice que conocer a los personajes de sus fotos lo ha ayudado a superar su propio miedo a la muerte.