Bayern Munich conquistó el sábado el primer triplete en la historia del fútbol alemán al vencer 3-2 a Stuttgart en la final de la Copa de Alemania.
En el último partido de Jupp Heynckes como técnico de Bayern, el club bávaro bajó el telón a una temporada de ensueño en la que ganó la Bundesliga, la Liga de Campeones y ahora la copa doméstica.
El Bayern se convirtió en apenas el séptimo club europeo que acapara el triplete.
Thomas Mueller abrió la cuenta por Bayern con un penal a los 37 minutos, y Mario Gómez aumentó la ventaja con un doblete (40, 61 minutos). Stuttgart amenazó en el segundo tiempo, cuando Martin Harnik (71, 81) marcó dos veces y le puso emoción al tramo final del encuentro.
“Mejor imposible”, dijo Franz Beckenbauer, leyenda viviente del Bayern. “Los de Stuttgart nos complicaron al final. Pero si se analizan los 90 minutos, la victoria es merecida. Ningún otro club había ganado estos tres títulos previamente. Este el mejor Bayern de la historia. No recuerdo una mejor temporada. Este es el momento cumbre”.
La 16ta consagración del Bayern en el torneo de copa se da una semana después que el equipo venció 2-1 a Borussia Dortmund en Londres para ganar la Liga de Campeones de Campeones. También batió un rosario de récords al adjudicarse su 23ra corona de Bundesliga.
Todo esto le deja una asignatura bien pesada a Pep Guardiola: emular los logros de Heynckes esta temporada.
“Es increíble lo que el club y el técnico hemos logrado durante la temporada”, dijo el capitán Philipp Lahm. “Han sido meses durísimos, pero hemos recibidos el premio”.
Sólo Celtic en 1967, Ajax en 1972, PSV Eindhoven en 1988, Manchester United en 1999, el Barcelona de Guardiola de 2009 y el Inter en 2010 habían logrado con anterioridad el triplete.
Bayern se apoderó de la posesión del balón desde el vamos, con un remate de Arjen Robben que el portero Sven Ulreich pudo rechazar a duras penas.
Alexandru Maxim tuvo la mejor ocasión de Stuttgart en el primer tiempo, un disparo que salió apenas desviado tras recibir un pase Ibrahima Traore.
El árbitro Manuel Graefe no vio un claro penal sobre Robben a los 31, cuando el capitán de Stuttgart Serdar Tasci quiso ir el balón y en cambio le dio una patada al puntero del Bayern.
Graefe pitó la pena máxima cinco minutos después cuando Traore cometió una infracción sobre el Lahm, y Mueller se encargó de rematar al fondo de la red.
Gómez aumentó poco antes del descanso, definiendo a boca de jarro cuando se encontró con un centro de Lahm.
Mueller sirvió el centro con el que Gómez marcó por segunda vez.
Heynckes procedió a sacar al delantero alemán para que recibiera una cerrada ovación en el que pudo haber sido su último partido con la camiseta del Bayern.
Harnik logró descontar al cabecear un centro de Gotoku Sakai. Pero el segundo del austríaco, aprovechando el rebote de un rechace inicial del arquero Manuel Neuer, le puso emoción a los últimos minutos.