El Distrito Federal cayó tres posiciones en el Índice de Transparencia y Disponibilidad de la Información Fiscal (ITDIF) de las Entidades Federativas, ubicándose en el sitio 21, entre otras por su falta de actualización de información.

 

Clasificado como una de las entidades con resultados de medio nivel, la consultora ARegional reveló en su más reciente informe que la capital del país obtuvo una calificación de 66.06%.

 

Al parecer, los esfuerzos para exponer la información fiscal de la capital mexicana no son suficientes, pues en su nivel cuatro entidades la superaron. A ello se suman los 17 que se ubicaron en el mayor puntaje del ranking, liderados por el Estado de México.

 

La transparencia fiscal de la Ciudad de México fue puesta a prueba con 5 criterios, respecto al acceso a la información que tiene a través de página web: marco regulatorio e información sobre los costos operativos, marco presupuestal programático, rendición de cuentas, evaluación de resultados y presentación de Estadísticas Fiscales.

 

En lo referente al Marco Programático Presupuestal , la capital mexicana presentó una mala nota, con sólo 12.3 puntos del máximo de 25, que son considerados para añadirse a la calificación total para cada entidad, de forma que prácticamente, se trata de una cifra reprobatoria.

 

En entrevista con 24 HORAS, Noemí García Carrillo, coordinadora de transparencia de ARegional, señaló que las malas notas de la Ciudad de México en este listado se deben que en su portal web la información simplemente no está lo suficientemente actualizada.

 

“La ventanilla de transparencia no está actualizada, durante el periodo de revisión tenían arriba la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos 2011.”

 

La pérdida de posiciones para el Distrito Federal se debe a que otras entidades mejoraron sus notas, por una parte, y a que la información es mucha, por lo que el hallazgo de datos específicos se vuelve complicado, consideró la ejecutiva de la consultora.

 

“Es de las entidades complicadas de evaluar, la saturación de información termina jugando contra ellos mismos”, añadió García Carrillo.