La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal mantiene vigilancia en torno los domicilios de los familiares de las 11 personas desaparecidas en la Zona Rosa, tanto en la ciudad de México como en los municipios de Coacalco, Nezahualcóyotl y Ecatepec.
En tanto, la Secretaria de Seguridad Pública del DF incrementó el número de elementos que resguardan sus oficinas centrales en la Zona Rosa, para prevenir cualquier tipo de contingencia que ponga en riesgo la estabilidad del área donde hace una semana desapareció un grupo de jóvenes.
La PGJDF informó que el propietario del antro Heaven After, Ernesto Espinosa Lobo, no se ha presentado a los citatorios que se le han enviado a su domicilio conocido para dar su declaración sobre los hechos.
Mientras que el Estado de México reforzó la vigilancia en sus áreas limítrofes con el Distrito Federal para detectar cualquier tipo de grupo delictivo o actividades irregulares relacionadas con la desaparición de 11 personas en la Zona Rosa.
Luego de las versiones que se dieron a conocer sobre el hallazgo de cuerpos en diversos municipios del Estado de México, como Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, las autoridades mexiquense determinaron reforzar sus medidas de seguridad y vigilancia, sobre todo de camionetas u autos sospechosos que pudieran estar relacionados con los hechos del domingo 26 de mayo.
Como se recodará, una de las prácticas criminales comunes relacionados con la venta y distribución de drogas en la zona Centro del país es utilizar las áreas limítrofes entre ambas entidades para dejar abandonados los restos de sus víctimas.
Ante esta posibilidad, las autoridades mexiquenses están en vigilancia permanente, aunque señalaron que no han recibido alguna petición de apoyo o notificación de ingreso al territorio mexiquense por parte de la PGJDF para realizar alguna diligencia ministerial como parte de las investigaciones por las personas perdidas.
Sin embargo, reconocieron que como parte de los convenios de colaboración y el programa Escudo Centro hay una comunicación permanente para intercambio de información, aunque aclararon que es una investigación que compete solo a la ciudad de México.
¿Dónde están?
A una semana de la desaparición de 11 personas de un antro de la Zona Rosa, las investigaciones apuntan a que el hecho no ocurrió, aunque no han podido establecer cuál es el paradero de las víctimas.
Al respecto, el ombudsman capitalino, Luis González Placencia, aseguró que para la Comisión de Derechos Humanos del DF, el crimen en contra de 11 personas se concretó, pues hay evidencias y testimonios presentados por los familiares de las víctimas que apuntan que los desaparecidos estuvieron en dicho lugar.
Explicó que la CDHDF ha acompañado a los familiares de los 11 desaparecidos a las reuniones que sostuvieron con el procurador, Rodolfo Ríos Garza, y han escuchado versiones convincentes de los hechos que se registraron el pasado el 26 de mayo pasado.
Por ello, descartó de que se trate de un asunto “creado por rumores” con la finalidad de desestabilizar políticamente al Gobierno del Distrito Federal, sobre todo porque la noticia se dio a conocer horas antes de que fuera inaugurada la Plenaria de la Conferencia Nacional de Procuración de Justicia, de la cual la PGJDF fue la anfitriona.
La Procuraduría local señaló que el único testigo que denunció los hechos no se ha presentado a ratificar la denuncia que realizó en primera instancia ante el Centro para la Atención de Personas Extraviadas o Ausentes.
Las autoridades de la PGJDF informaron que existen dudas sobre la certeza de los detalles que explicó el denunciante, el cual no se ha presentado a ampliar su declaración ante el MP de la Fuerza Antisecuestros, pues reconoció que el día de los hechos estaba en completo estado de ebriedad, además que la denuncia fue presentada un día después de los hechos, el lunes 27 de mayo.
En éste sentido, González Placencia consideró que la dependencia capitalina debe estar pendiente de la suerte que haya corrido esta persona, que según se dijo alcanzó a escapar del lugar, pues es importante garantizar su seguridad para que no se convierta en otro de los desaparecidos, pues hasta el momento ni los familiares de las víctimas lo han vuelto a ver.
Asimismo, reconoció la gravedad del caso, ya que sí bien la PGJDF asegura que no hay elementos para establecer que las personas estuvieron en dicho lugar, lo que es un hecho es que hay 11 personas desaparecidas desde hace una semana, no hay pista de su paradero y que sus familias siguen buscando.
El ombudsman pidió seriedad para las autoridades en la investigación del caso, al igual que para los medios de información, ya que se ha registrado un fenómeno informativo importante de datos que no son precisos, y que crean situaciones de angustia para los familiares de las personas desaparecidas.
Adelantó que familiares de las víctimas se reunirán hoy con autoridades de la PGJDF para darles a conocer información que han recabado.