Elementos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) catearon un departamento que rentaba y habitaba Marcos Ledesma, uno de los dueños del bar Heaven, y su esposa Brenda Angélica Casas Figuera, quien desde ayer se encuentra bajo detención con control judicial por la desaparición de los 12 jóvenes el domingo 26 de mayo.

 

Cerca de las 11:00 horas de hoy, personal de la Fuerza Antisecuestros y agentes del Ministerio Público arribaron al inmueble, ubicado en el número 710 de la avenida Gabriel Mancera, en la colonia Del Valle, perímetro de la delegación Benito Juárez.

 

Al llegar a esta dirección, los investigadores no hallaron a los ocupantes del departamento, pero, por ser rentado, el dueño del mismo les dio acceso para que llevaran a cabo la indagatoria.

 

Los agentes y peritos de la PGJDF permanecieron en el departamento por cerca de tres horas, en las cuales recabaron evidencias y capturaron fotografías del interior del inmueble.

 

Al cabo de este tiempo salieron con bolsas negras en las que guardaron artículos que obtuvieron durante la diligencia.

 

Cabe agregar que además de Brenda Casas Figuera, se encuentran detenidos Gabriel Carrasco, alias “El Diablo”, de 39 años, y Andrés Henonet González, de 38, quienes también se encuentran en el Centro de Detención con Control Judicial de la PGJDF, antes Centro de Arraigos.

 

Detenidos traían armas y droga

 

Sobre los detenidos, quienes por el momento enfrentan cargos de encubrimiento flagrante, el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Jesús Rodríguez Almeida, declaró que éstos, al momento de ser detenidos, traían droga, una pistola y un arma blanca.

 

En conferencia de prensa el funcionario capitalino detalló que la detención se efectuó como parte de una denuncia anónima en la que un peatón alertó sobre la ubicación de armas en el vehículo en el que viajaban los ahora arraigados.

 

“Hubo una detención por un reporte que se les hizo a los elementos, se les encontró un arma, drogas y un cuchillo, y se les preguntó por qué traían esos objetos, refiriendo que tenían miedo porque trabajaban para ese bar (Heaven) y es eso por lo que los detuvieron”, explicó Rodríguez Almeida.