ESTAMBUL. 13 personas han sido trasladadas este lunes al juzgado en la ciudad turca de Adana acusadas de haber utilizado Twitter para planificar agresiones a bienes públicos y privados, informa el diario Cumhuriyet.
En su publicación, el periódico menciona que se trata de 11 hombres y dos mujeres, acusados de impulsar con sus mensajes daños a edificios públicos y de partidos y vehículos particulares, así como agresiones a la policía.
Cinco personas ya habían sido arrestadas el pasado sábado en Adana por usar las redes sociales en relación con las protestas que sacuden Turquía desde hace 10 días, y que han tenido uno de sus mayores focos en esta ciudad del sur del país.
Otras ocho personas fueron detenidas después y trasladadas este lunes a disposición judicial, tras su búsqueda desde el sábado.
La semana pasada fueron detenidas en Esmirna otras 34 personas bajo acusaciones de haber usado Twitter para incitar a las revueltas, pero todas fueron liberadas tras ser interrogadas.
Por otra parte, aumentan los rumores en Estambul sobre un inminente desalojo policial de la plaza Taksim, actualmente ocupada por manifestantes.
Can Dundar, columnista del diario Milliyet, explicó este lunes que entre los manifestantes se ha extendido el rumor de que la Policía desalojará mañana la plaza.
Pese a que el gobernador de Estambul aseguró ayer domingo que no se va a producir una intervención policial para desalojar Taksim y el parque Gezi, donde no entran los agentes desde hace más de una semana, el duro tono empleado por el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha aumentado la preocupación de los activistas.
Erdogan volvió a referirse ayer a los manifestantes como saqueadores y aseguró que su paciencia tiene un límite y que si siguen las protestas empleará el lenguaje que entienden.
También exigió el fin de las protestas y amenazó con hacer que quienes no respeten su gobierno rindan cuentas, aunque no especificó lo que eso implica.
En Ankara, los choques entre antidisturbios y manifestantes que trataban de llegar a la plaza Kizilay se prolongaron hasta la madrugada. Fuentes judiciales informaron de que 12 personas, incluidos dos ciudadanos iraníes, fueron arrestados en esta protesta y que muchos manifestantes resultaron heridos.