BRUSELAS. El número de inmigrantes que llegan a México volvió a caer en 2011 luego de tres años consecutivos en alza, indicó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe anual “Perspectivas de la Migración Internacional”, publicado hoy aquí.
El dato contrasta con la tendencia global de repunte en los flujos de inmigrantes después de dos años en disminución por causa de la crisis económica y financiera.
En 2011 un total de 21.5 mil extranjeros ingresaron en México, 18 por ciento menos que en 2010, cuando la cifra se había elevado a 26.2 mil frente a 23.9 mil en 2009, a 15.1 mil en 2008 y 6.8 mil en 2007.
Los datos preliminares para 2012 indican una nueva reducción de 3%, hasta 20.7 mil inmigrantes.
La mayoría de los extranjeros llegados a México en 2011 fue procedente de Estados Unidos (20%), Cuba (8%), Colombia (8%), Venezuela (6%) y Guatemala (6%).
Aún así, México subió de la sexta a la quinta posición en la lista de los principales países de origen de los inmigrantes, encabezada por China, Rumanía, Polonia e India.
Datos del Banco Mundial revelan que los mexicanos expatriados enviaron al país 24 mil millones de dólares en 2012, “un nivel similar al de 2011, aunque mucho más elevado que los de 2008 y 2009”, precisó la OCDE.
El principal destino de los mexicanos sigue siendo Estados Unidos, que acogió a 143.4 mil de ellos en 2011, frente a 139.1 mil en 2010, y contabilizó una población de 11.7 millones de residentes nacidos en México en 2010.
El país respondió en 2011 por 29 por ciento del flujo total de inmigrantes legales a Estados Unidos y por 59 por ciento de la población de sin papeles en su vecino del norte.
En 2011 un total de 405 mil mexicanos fueron deportados por las autoridades estadunidenses, un número que el año anterior se elevaba a 469 mil.
Al mismo tiempo, 2.4 mil inmigrantes mexicanos fueron repatriados de Estados Unidos en 2012 a través de un programa piloto de cooperación bilateral destinado a “aliviar la presión sobre los municipios mexicanos cercanos a la frontera” estadunidense.
La OCDE destacó, además, el papel de México como país de tránsito para los inmigrantes irregulares que buscan llegar a Estados Unidos, que en 2010 sumaron cerca de 140 mil personas, la mayoría de ellas ciudadanos de los países centro-americanos.
“Tanto razones económicas como la creciente vulnerabilidad causada por la violencia del crimen organizado, incluyendo secuestros y asesinatos durante el tránsito, llevaron a una reducción en la migración de tránsito (en México) desde 2005”, señaló el informe que, sin embargo, no proporciona cifras para los años anteriores a 2010.