MOSCÚ.— Miles de activistas rusos condenaron lo que llaman “gobierno autoritario” del presidente Vladimir Putin en una marcha por las calles de Moscú, al tiempo en que exigieron la liberación de personas a las que consideran presos políticos.

 

La marcha en el Día de Rusia, un festivo nacional, se celebró para apoyar a 27 personas arrestadas después que una protesta se tornó violenta en vísperas de la juramentación de Putin hace más de un año. Dieciséis de los acusados siguen en prisión en espera de su juicio, bajo cargos que los podrían mantener encarcelados hasta por 10 años.

 

Al parecer las detenciones, en especial las de rusos comunes y corrientes que se sumaron a las marcha en contra de Putin por primera vez y que en algunos casos parecen haber sido arrestados al azar, forman parte de los intentos del Kremlin por desalentar a la gente de unirse a las protestas.

 

Entre 10 mil y 15 mil manifestantes participaron en las marchas de ayer, mucho menos de los 100 mil o más que protestaron contra Putin antes de su elección a un tercer periodo presidencial, lo que refleja la cautela que ha restado intensidad al movimiento de protesta. Sin embargo, el número de manifestantes aún fue superior al que muchos esperaban.

 

El líder opositor Alexei Navalny y su esposa encabezaron la marcha con una pancarta que leía: «Libertad para los prisioneros del 6 de mayo. Por su libertad y la nuestra». El Día de Rusia conmemora la Declaración de la Soberanía Nacional de la Federación de Rusia emitida en 1990 cuando formaba parte de la ahora extinta Unión Soviética.

 

«Uno no puede permanecer sentado en casa cuando el gobierno empieza las represiones contra personas ordinarias, ciudadanos decentes de nuestro país —gente que no desea vivir en este pantano, gente que desea ver a su país progresar», dijo el activista civil Vitaly Zolomov. «Y yo creo, y esto es algo que le digo a todos, que resulta criminal mantenerse al margen en Rusia cuando la ilegalidad se ha convertido en la norma».

 

También el miércoles el presidente ruso, Vladímir Putin  fue elegido hoy líder del Frente Popular de Rusia (FPR), la plataforma social que él mismo ha promovido para aglutinar a sus partidarios ante la caída en las encuestas de los partidos oficialistas.»Rusia necesita la aportación de cada uno. Una participación sincera en la construcción del bienestar del país», declaró el mandatario ruso en su discurso ante los delegados del FPR, citado por agencias rusas.

 

El movimiento, fundado en mayo de 2011 como plataforma electoral para las elecciones parlamentarias de ese mismo año y las presidenciales de 2012, ahora tiene como objetivo involucrar «directamente» al pueblo ruso en el destino de su país. «Lo más importante es que ese trabajo (del FPR) tenga un carácter vivo, que esté relacionado directamente con el pueblo, con sus intereses y la solución de sus problemas», señaló.