El ministro de Deportes en Brasil, Aldo Rebelo, aseguró que no se tolerarán manifestaciones que alteren el desarrollo de los eventos de la Copa Confederaciones, celebrada del 15 al 30 de junio en el país sudamericano.

 

“Quien crea que puede impedir la realización de esos eventos, enfrentará la determinación del gobierno de impedirlo”, declaró Rebelo, según la estatal Agencia Brasil.

 

El ministro de Deportes recordó que el gobierno brasileño “asumió la responsabilidad y el honor” de llevar a cabo los eventos deportivos, por lo que es su deber ofrecer seguridad e integridad a los aficionados nacionales y extranjeros.

 

Las expresiones de descontento que se han realizado en Brasil son a causa del gasto público de 15 mil millones de dólares que se ha hecho para la realización tanto de la Copa Confederaciones 2013 como del Mundial 2014.

 

Mientras tanto, Rebelo aseveró que por cada 0.5 dólares que se tomaron del poder público para la Confederaciones, la iniciativa privada invirtió 1.5 dólares.