Este año, la temporada de ciclones será más intensa en el océano Atlántico, según los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional y de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos.

 

Yucatán, Campeche, Quintana Roo y Veracruz son estados que “tradicionalmente son susceptibles, pero este año están arriba del pronóstico porque se espera una temporada activa”.

 

De acuerdo con las dependencias, se espera la llegada de hasta 20 tormentas, de las cuales nueve serían tormentas tropicales, cinco huracanes moderados (en grado uno o dos), y cuatro más intensos (de tres, cuatro o cinco grados), según la escala Saffir-Simpson.

 

Estos números están por encima del promedio de las tormentas que se registran en el Atlántico. El año pasado se registraron 19 tormentas, incluyendo 10 huracanes, de los cuales cuatro fueron intensos y dejaron daños en el territorio nacional.

 

Sólo para esta semana se espera que la entrada de la depresión tropical número 2 deje fuertes lluvias en los cuatros estados señalados. Los gobiernos de Veracruz y Quintana Roo emitieron la víspera un aviso especial por las lluvias que podrían extenderse las siguientes 48 horas. Las previsiones este lunes apuntaban a que el fenómeno entrara a Belice y hoy llegara a las costas de la península yucateca, causando fuertes lluvias y vientos, que incluso alcanzarían a algunos estados del centro del país.

 

Raúl Rivera Palacios, jefe de Proyecto de Tiempo Severo del SMN, no descartó que los ciclones previstos para la temporada en el océano Atlántico también puedan ocasionar estragos y causar pérdidas, tanto humanas como económicas.

 

“El impacto no es sólo con la amenaza misma, también se debe tomar en cuenta la vulnerabilidad de la población, si impacta en zonas más vulnerables puede haber pérdidas humanas, daños a las vías de comunicación y las comunidades tardan más tiempo en recuperarse”, apuntó.

 

De acuerdo con las previsiones del SMN, al menos un huracán de alta intensidad y una tormenta tropical pueden golpear directamente el territorio mexicano y causar daños importantes; pero los promedios señalan que cada temporada cuatro huracanes afectan las entidades costeras y algunas otras del interior de la República.

 

Los reportes de la dependencia indican que los ciclones más intensos ocurren entre agosto y octubre, alcanzando su pico más alto en septiembre. Es decir, en ese mes hay mayor cantidad de ciclones con mucha más fuerza que en el resto de la temporada.

 

Las inundaciones y los fuertes vientos, consecuencia de los ciclones, determinan que se active el Plan de Emergencias DN-III y la aplicación del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), que en los últimos años se ha mantenido en un promedio de cinco mil 500 millones de pesos para atender estas emergencias, además de heladas, sequía, incendios y otros desastres.

 

Por ello, dijo Rivera Palacios, recomendó seguir todas las instrucciones que emiten tanto el Meteorológico como Protección Civil, a fin de evitar accidentes. Por ejemplo, en estados como Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Puebla, Guerrero, Michoacán se recomienda evitar viajar por carreteras o caminos donde pueda haber deslaves.

 

¿Cómo se mide un ciclón?

 

Se clasifican de acuerdo con la intensidad de sus vientos

63km/h depresión tropical

118km/h tormenta tropical

119km/h hasta 250km/h huracán