El consumo de café no es considerado como parte de un estilo de vida saludable, por contener un estimulante; sin embargo, es una de las bebidas que más se consumen a nivel mundial.
En los últimos años científicos han volcado sus estudios en determinar los beneficios que la bebida trae a la vida de quien la toma.
Muestra de ello es el hallazgo del Instituto Nacional de Cáncer de EU que determinó que el café es una fuente rica de antioxidantes que colabora con la longevidad de las personas.
El instituto comenzó en 1995 un análisis sobre la salud de 400 mil voluntarios libres de enfermedades, de entre 50 y 71 años. Para 2008, más de 50 mil participantes habían muerto. Hecho que arrojó que los hombres que bebían dos o tres tazas de café al día tenían 10% menos tendencia a la muerte que los que no lo hacían, en el caso de las mujeres tenían 13% menos probabilidades de morir.
Los científicos aúno no determinan con exactitud la relación entre el café y la longevidad, pero la relación es verdaderamente sorprendente.
Por mucho tiempo la atención se ha centrado en que la cafeína puede aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca, aumento de niveles de colesterol y presión arterial. Pero dichas afirmaciones son inconsistentes, ya que lo anterior tiene una relación más estrecha con el consumo de tabaco.
Los estudios en torno al tema no sustentan una relación entre el consumo de café y la mortalidad. Por el contrario, sugieren que el consumo de tres o cuatro tazas al día reduce el riesgo de desarrollar diabetes, cáncer de piel, cáncer de próstata, cáncer oral y cáncer de mama.
Un experimento de la Universidad de Illinois en 2012 con ratones sometidos a la falta de oxígeno, demostraron que la cafeína ayudó a la mitad de los animales a recuperar 33% más rápido sus recuerdos, a diferencia de los que no tuvieron acceso al estimulante.
Un examen del tejido cerebral de los ratones demostró que la cafeína ayuda a evitar la demencia porque moldea el entorno bioquímico del cerebro.
En 2012, investigadores de la Universidad del Sur de Florida y la Universidad de Miami midieron los niveles de cafeína en la sangre de adultos mayores con signos de olvido grave y fueron evaluados cuatro años más tarde. El hallazgo fue que las personas con poca o nada cafeína eran más propensos a desarrollar Alzheimer.
También se ha dicho que el café ayuda a desarrollar la inteligencia, adelgazar, nutrir, pero habrá que esperar a que la ciencia compruebe esos beneficios y defina si es la cafeína por sí sola o si el café contiene otros ingredientes valiosos. Por el momento dos o tres tazas de café en días lluvisos son deliciosas.