La detención de Eduardo Ramírez Vallejo, ex secretario particular del jefe delegacional de Coyoacán, Mauricio Toledo, por el delito de cohecho, es apenas la punta del iceberg de la corrupción que priva en la delegación, aseguró el Partido Acción Nacional en el DF.

 

La mañana de ayer, elementos de la Procuraduría capitalina detuvieron a Ramírez Vallejo en su domicilio de Santa Úrsula Coapa por el delito de cohecho, al supuestamente pedir un millón de pesos al empresario Manuel Dacosta para reabrir una gasolinera clausurada.

 

El diputado panista por Coyoacán en la Asamblea Legislativa, Andrés Sánchez, informó que Ramírez Vallejo tiene 48 horas para probar su inocencia, e hizo un llamado para se aplique la ley y evitar que se genere “una simulación” de juicio.

 

El asambleísta aseguró que esta denuncia impacta a la administración coyoacanense, pues el delito quedó establecido en la grabación que realizó el empresario que fue extorsionado.

 

Reiteró que su partido pedirá al jefe de Gobierno que las diligencias correspondientes garanticen que ningún ciudadano este por encima de la ley, “aunque sea el compadre del delegado o incluso su secretario”, apuntó.

 

El legislador reconoció que el trabajo que realiza la Procuraduría capitalina es con base en lo que “ya se conoce de los hechos de corrupción, cohecho y extorsión en la delegación Coyoacán, que es sólo un ápice  de todo lo que existe” aseguró.

 

Por su parte, el jefe de gobierno del Distrito Federal Miguel Ángel Mancera, indicó sobre el caso que “se está cumplimentando un mandamiento judicial” por lo que señaló que estará pendiente de que se revise el debido proceso judicial. RAFAEL RAMÍREZ