La burocracia panista que creció y permanece en la administración de Enrique Peña Nieto es muestra de la democracia en México, aunque ésta debe estar alejada de fines políticos y electorales, así coincidieron la senadoras Marcela Guerra y Marcela Torres, del PRI y PAN, respectivamente, en entrevista con 24 Horas.
Ayer lunes, 24 Horas publicó que más de 6 mil burócratas de filiación azul tienen copados puestos de decisión clave en el organigrama de la burocracia, amparados por el Servicio Profesional de Carrera (SPC), instrumentado durante las administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón.
A este respecto, la priista Marcela Guerra reconoció que el SPC creció con los gobiernos “de la derecha”, y que sin duda existen mandos medios que siempre quieren quedarse.
“La burocracia que quiere quedarse, es normal, lo que sí debe imperar es la razón, quiénes sí justifican sus puestos con base en exámenes y efectuar periódicamente el Sistema de Evaluación de Desempeño”, comentó la senadora por Nuevo León.
Por su parte, Marcela Torres Peimbert, afirmó que este fenómeno es normal en un país democrático como México, y que la cultura política debe acostumbrarse a esta situación.
“Sería imposible cambiar a todo el personal, eso no sucede en ningún país, así que esto debe tomarse como una buena muestra de democracia”, concluyó Torres Peimbert.
Añadió que la burocracia del Servicio Profesional de Carrera debe tener fines operativos y administrativos, pero “nunca políticos” y que la permanencia de personal panista, es una muestra de “apertura y democracia”.
Rechazó que en los puestos donde se manejan programas sociales también haya mandos azules, ya que “con conocimiento de causa te puedo decir que los delegados, por ejemplo en Querétaro, que están operando los programas son totalmente priistas”.