SARAJEVO. La muerte de una bebé tiene a miles de personas en Bosnia-Herzegovina enfrentando cruzando las profundas divisiones étnicas para protestar contra el fracaso del gobierno en solucionar un vacío en la ley que evita que a los recién nacidos se les dé un número de identificación y, por extensión, documentos de viaje y atención de salud.

 

Las protestas, que empezaron el 5 de junio de 2013 y han sido llamadas “Bebelución”, se iniciaron con la historia de Belmina Ibrišević, bebé de tres meses nacida gravemente enferma que en ese momento no pudo salir del país para recibir en el extranjero el tratamiento de células madre que necesitaba, aunque su estado de salud era crítico y el tratamiento no podía hacerse en Bosnia-Herzegovina.

 

Días después, el malestar aumentó cuando se supo la noticia de que Berina Hamidović, de un mes de nacida, había muerto en el Instituto para Madres y Niños en Belgrado, Serbia, de sepsis. El tratamiento médico que necesitaba había demorado demasiado.

 

La bebé no pudo viajar por la incapacidad del país de aprobar una nueva ley sobre números de identificación, después de que la antigua ley expiró en febrero. Gracias a este vacío legal, los recién nacidos solamente tienen un número temporal que les impide obtener documentos de viaje, que hubieran sido necesarios para recibir atención médica en el extranjero.

 

Los manifestantes empezaron a expresar sus opiniones en contra de la inacción de los legisladores con la etiqueta #JMBG, que significa número único de ciudadano. El 6 de junio, los manifestantes se reunieron en Sarajevo y bloquearon el edificio del Parlamento, y se negaron a permitir que los políticos y los invitados extranjeros que estaban al interior salieran y exigieron la urgente aprobación de la ley sobre el número único del ciudadano.

 

Las personas involucrada en las protestas crearon el sitio web ¡JMBG para todos! Facebook, mientras que la página de fans de JMBG tiene ya cerca de 23,000 en esta red social. Donde detallas las demandas de ciudadanos con respecto a legislación relacionada con el número único del ciudadano y la creación de un fondo para el tratamiento de categorías en peligro de la población. con este mensaje:

 

“Somos los ciudadanos de este país -padres con hijos, estudiantes universitarios, amas de casa, trabajadores, desempleados, pensionistas, sin importar grupos étnicos o religiosos, ni ninguna otra condición, por lo que es nuestro interés común que se respeten los derechos de toda persona, los de los niños por encima de todos. Nos dirigimos a todos los ciudadanos que desean vivir en un estado donde los políticos hagan su trabajo y completen sus obligaciones legales. Un estado en el que los intereses nacionales y partidarios sean secundarios y las vidas dignas y seguras de los ciudadanos sean lo principal.

 

Aunque a final los padres de la bebé Belmina se las arreglaron para hacerla cruzar la frontera para recibir tratamiento, la muerte de la bebé Berina Hamidović, de un mes de nacida, debido a esta obstrucción burocrática en su tratamiento médico, avivó las protestas, como informaron los medios bosnios.

 

Las protestas en Sarajevo continúan, ahora con el nombre de “Bebelución” -una revolución pacífica que logró reunir a más de 10 mil personas en las calles el 18 de junio, con el apoyo de figuras públicas y de las repúblicas ex yugoslavas que han expresado su dolor y su rechazo.

 

Alguna vez fue un número de identificación, ahora #JMBG se ha convertido en una etiqueta, un meme y un llamado a la revolución en los países de la antigua Yugoslavia. A los políticos les han dado plazo hasta el 30 de junio para aprobar la ley y crear un fondo de solidaridad para los que necesiten tratamiento médico.

 

Hasta entonces, la “Bebelución” continúa.