El ex empleado de la CIA, Edward Snowden, rompió su silencio por primera vez, desde que huyera de Hong Kong a Moscú hace ocho días en donde acusó al presidente de Estados Unidos, Barack Obama de bloquear su posible extradición, aún cuando había señalado que no iba a permitir la intromisión de ningún funcionario en el caso.

 

En la carta  que Snowden hizo pública a través de WikiLeaks precisa: “El jueves el presidente Obama declaró ante todo el mundo que no iba a permitir que ningún diplomático “entrara en tejes y manejes” sobre mi caso. Sin embargo, ahora se ha reportado que después de haber prometido no hacerlo, el presidente ordenó a su vicepresidente presionar a los líderes de las naciones en las que he solicitado protección para que negaran mis peticiones de asilo”.

 

El estadunidense asegura que este actuar es un recurso de antiguas malas prácticas de agresión política. “Este tipo de engaño de un líder mundial no es justicia, tampoco es un castigo ilegal de expatriación… Su propósito es asustar y no a mí, sino a los que quieren venir a reemplazarme”, agrega el documento.

 

“Hace una semana hui de Hong Kong después de que quedara claro que mi libertad y mi seguridad estaban amenazadas por haber revelado la verdad. Mi libertad se ha mantenido debido a los esfuerzos de mis nuevos y viejos amigos, familiares y otras personas, a las cuales nunca he conocido y probablemente nunca conoceré. Les confié mi vida y ellos confiaron en mí, algo por lo que siempre les estaré agradecido” señala.

 

Cuestiona que siendo EU uno de los más fuertes defensores del derecho humano de solicitar asilo, hoy el gobierno de su país lo rechaza. “La Administración Obama ha adoptado la estrategia de utilizar a la ciudadanía como arma”.

 

En el documento que firma como Edward Joseph Snowden señala: “Soy firme en mis convicciones y estoy impresionado por los esfuerzos aplicados por muchos.”