BRUSELAS. El rey Alberto II de Bélgica anunció hoy su abdicación, tras casi veinte años de reinado, en su hijo primogénito, el príncipe Felipe, que se convertirá en el próximo jefe del Estado belga.
“Después de 20 años de reinado, estimo que es el momento de pasar la antorcha a la generación siguiente. Constato que el príncipe Felipe está bien preparado”, dijo el rey de los belgas en un discurso televisado, en el que señaló que su abdicación se producirá el 21 de julio próximo.
El rey Alberto alegó motivos de edad y de salud para haber tomado esa decisión.
“He entrado en mi año 80, una edad a la que nunca llegaron mis predecesores en el ejercicio de sus funciones. Constato que mi edad y mi decisión no me permiten ejercer mis funciones como quisiera”, señaló el monarca de los belgas, que se dirigió a la nación en francés, neerlandés y alemán.
Agregó que sería “faltar a los deberes y a mi concepción de la función real querer mantenerme en ejercicio a todo precio, sin poder asumir plenamente mi papel”.
Alberto II subrayó que “el príncipe Felipe está bien preparado para sucederme. Tiene, junto a la princesa Matilde, toda mi confianza”.
Asimismo precisó que la abdicación en el príncipe Felipe se producirá el próximo 21 de julio, día de la fiesta nacional belga.
De su sucesor destacó que con las misiones económicas que ha dirigido en el extranjero, “el príncipe Felipe ha demostrado hasta qué punto está comprometido con el país”.
“El papel del rey de los belgas y su legitimidad es ponerse al servicio de la democracia y de sus conciudadanos, únicos titulares de la soberanía”, señaló el rey Alberto, que subrayó que “la institución real debe seguir evolucionando con su tiempo”.