El presidente de Bolivia, Evo Morales, llegó a las 23.30 hora local (04.30 GMT) al aeropuerto de El Alto, vecino a La Paz, donde le esperaba todo su gabinete con el vicepresidente Álvaro García Linera al frente.

 

Morales arribó finalmente a su país en medio de una grave crisis diplomática entre Europa y Latinoamérica, después de que Francia, Italia y Portugal negaran el sobrevuelo y aterrizaje de su avión presidencial por sospechas de que trasladara al exanalista de la CIA Edward Snowden.

 

Antes del arribo de Morales a su país, el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Alí Rodríguez, confirmó que ese bloque convocó la reunión extraordinaria que se celebrara mañana en Bolivia para tratar la “ofensa” contra el presidente de esa nación, cuyo avión no pudo sobrevolar algunos países europeos.

 

En un comunicado, el organismo, con sede en Ecuador, indicó que en la cita, que tendrá lugar en la ciudad de Cochabamba, se analizará “la relación de esos países europeos con los miembros de la Unasur, pues todos ellos tienen intereses importantes en la región”.

 

El martes por la noche Bolivia denunció que varios países europeos cerraron sus espacios aéreos al avión en el que viajaba Morales de regreso a su país, tras participar el lunes en Moscú en el Foro de los Países Exportadores de Gas.

 

La aeronave de Morales tuvo que desviarse a Viena ante la negativa de Francia, Italia y Portugal a permitir que ingresara en su espacio aéreo por la sospecha de que a bordo iba el extécnico de la CIA, Edward Snowden, acusado y reclamado por espionaje por Estados Unidos.

 

“Habrá que definir si bastará con una excusa diplomática o se adoptarán otras medidas más allá de eso”, agrega la nota de Unasur.

 

A la reunión, solicitada por el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, han confirmado sus asistencia los mandatarios de Bolivia, Ecuador, Venezuela, Argentina, Uruguay y Surinam, mientras que el resto de las naciones informarán posteriormente sobre el nivel de su representación.

 

Según Rodríguez, el objetivo de la cumbre es “el pronunciamiento de Suramérica sobre el virtual secuestro del mandatario Morales por varios países europeos, que impidieron el sobrevuelo del avión presidencial en clara violación de las leyes y normas internacionales”.

 

El secretario general del organismo suramericano subrayó “el necesario respeto que merecen la dignidad y soberanía de la región” y confió en “la unidad del bloque regional ante esta ofensa recibida a uno de sus miembros, que equivale a ofender a todos”.

 

La Unasur está integrada por Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Chile, Uruguay, Venezuela, Guayana, Surinam, Perú y Paraguay. Este último se encuentra suspendido del bloque tras la destitución de Fernando Lugo el 22 de junio pasado.

 

Hoy la canciller peruana, Eda Rivas, había asegurado que la reunión de algunos presidentes latinoamericanos mañana en la ciudad boliviana de Cochabamba no era una cita de la Unasur, sino una reunión de desagravio al mandatario de Bolivia.