Mohamed Mursi, depuesto hoy por el Ejército como jefe de Estado de Egipto, dijo que las medidas anunciadas por el jefe de las Fuerzas Armadas, Abdel Fatah al Sisi, son un “golpe” y que él continúa siendo el presidente de Egipto.
Además pidió hoy a los altos mandos militares y a los soldados que cumplan con la Constitución y la ley y no respondan al “golpe” (de Estado), y que eviten implicarse en el derramamiento de sangre.
Antes de que se anunciara el golpe militar Mohamed Mursi dijo que “no aceptará nunca renunciar de forma humillante a su patria, su legitimidad y su religión”, en un breve mensaje colgado en su página oficial de Facebook.
“Que sepan nuestros hijos que sus padres y abuelos fueron hombres que no aceptan la injusticia y que no aceptarán nunca renunciar de forma humillante a su patria, su legitimidad y su religión”, señala el comunicado.
El presidente de Egipto, Mohamed Mursi, fue notificado por el Ejército de su país que ya no es presidente, por lo que se suspendió la Constitución, anunció el jefe del Ejército, Abdel Fatah al Sisi.
Las Fuerzas Armadas egipcias señalaron que el presidente del Tribunal Constitucional Supremo asumirá provisionalmente el gobierno de Egipto.
En un mensaje televisado, el jefe militar egipcio anunció también la creación de un nuevo gabinete.
Desde hace días se han realizado enormes protestas exigiendo la salida de Morsi. Al llegar la noticia del anuncio del jefe militar, las multitudes estallaron en gritos de júbilo.
Antes el jeque de la institución islámica de Al Azhar, Ahmed al Tayeb, el papa copto, Teodoro II, el representante de la oposición, Mohamed El Baradei, y jóvenes del movimiento “Tamarrud” alcanzaron un acuerdo para sacar a Egipto de la crisis.
En él está prevista una breve etapa interina, que será seguida por la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias, informó la agencia oficial Mena. (Agencias)