Coloridas esculturas que muestran cuerpos desnudos y en posiciones explícitamente sexuales son el principal atractivo que ofrece el único parque en el mundo enfocando al erotismo.

 

El lugar bautizado “Jeju Loveland”, que funciona desde 2004, ofrece una extensión de salas en las que se exhiben donde las obras muestran diferentes actos sexuales.

 

Definido, en la página oficial del parque, como un espacio donde el arte de tipo sexual y el erotismo se conjugan, además de “romper” con los tabús tradicionales que giran alrededor del sexo, esto lo consiguen mediante el humor y picardía.

 

A diferencia de Europa en donde las expresiones del erotismo quedaron recluidas a museos como en Amsterdam, Barcelona, París, Berlín e incluso Nueva York; mientras que en el “Parque del sexo”, como popularmente se nombra al espacio, es posible interactuar con las esculturas.