Mazda CX-5 representó el comienzo de una nueva era para la marca. Y es que se trata del primer modelo de una generación de modelos que ofrecen un equilibrio ideal entre diversión, seguridad y ecología. Para lograr lo anterior, este SUV compacto lleva todas las tecnologías SKYACTIV desarrolladas para que los vehículos de Mazda sean más eficientes, ágiles y respetuosos con el medio ambiente. Todo lo anterior se ha desarrollado utilizando un enfoque revolucionario en todo lo relativo al diseño, ingeniería y fabricación, resolviendo objetivos aparentemente contradictorios al desarrollar una gama de motores, transmisiones, carrocerías y bastidores eficaces.
Para el desarrollo del CX-5 se puso especial atención en cuatro atributos fundamentales. De inicio se creó un utilitario con un diseño atractivo y emocional, combinado con funcionalidad y excelentes acabados interiores. Asimismo fue una prioridad la ecología, la seguridad y la dinámica de conducción.
Mazda CX-5 basa su edificación en la estrategia de reducción de peso. En busca de esta disminución los ingenieros buscaron exhaustivamente cualquier posibilidad de optimización, siempre con el objetivo de mejorar la rigidez. Por lo que su manejo se acerca al de un sedán. Gracias a la creación de la carrocería SKYACTIV-Body, es que el vehículo desarrolla un comportamiento estable y dinámico, pero al mismo tiempo ayuda a reducir el consumo de combustible. No obstante, a pesar de su estructura ligera, el Mazda CX-5 también está diseñado para lograr la máxima seguridad.
Por encima de la estructura sólida y ligera, Mazda CX-5 está cubierto de una carrocería con un diseño vanguardista basada en el lenguaje de diseño “KODO, alma en movimiento”. Esta filosofía se presentó por primera vez en 2010 en el concepto Shinari y posteriormente en el Minagi, el SUV compacto en el que se basa el CX-5. De esta manera se marcó el inicio de una nueva generación de los modelos de Mazda y que posteriormente ocupó el Mazda6 y ahora el Mazda3.
Como resultado el CX-5 obtiene un exterior con líneas fluidas que provocan esa sensación de movimiento. Si bien el diseño con apariencia activa y potente, es una novedad, el vehículo despliega toda la imagen característica de Mazda. Pero el Mazda CX-5 no se queda únicamente en una estética atractiva.
Todo el equipo de diseñadores del Mazda también consiguieron que el CX-5 obtuviera una aerodinámica excepcional. Ninguno de sus competidores tiene un coeficiente aerodinámico (0.33) como el de este modelo. Con ello se rompen los límites convencionales de los SUV compactos. Estos son tan solo algunos ejemplos de la combinación de forma y funcionalidad del CX-5.
En el interior, encontramos un habitáculo espacioso y sofisticado revela que este vehículo ha sido diseñado para el mundo de hoy. Mazda CX-5 ofrece una cabina cómoda y flexible, con soluciones innovadoras e inteligentes, como el asiento trasero abatible en tres secciones 40/20/40, el sistema de audio Bose o el sistema de información y entretenimiento altamente intuitivo.
Todo está orientado al conductor, con una arquitectura que refleja la robustez exterior. Como era de esperar en un Mazda la vista y el tacto de los materiales acentúan el carácter deportivo del CX-5. Desde que abres la puerta el vehículo te invita a conducirlo. Una vez más el lenguaje de diseño KODO ofrece un nivel de calidad ejemplar, además de una ergonomía y visión excepcional.
De igual manera Mazda ha conseguido un gran nivel insonoridad en el habitáculo, uno de los más bajos del segmento. Para ello se introdujeron materiales absorbentes en las zonas de propagación del ruido desde el motor al habitáculo. A su vez se controló la resonancia de la suspensión y la transmisión del ruido y vibraciones a través del suelo.
Mazda CX-5 está disponible con un motor de 2.0 o 2.5 litros, ambos con el sello SKYACTIV-G. En el primer caso la potencia es de 155 caballos de fuerza y 150 lb-pie. Por su parte, el 2.5 litros ofrece 186 caballos de fuerza y 184 lb-pie. Para enviar todo el poder a las ruedas delanteras o a las cuatro en el caso de la versión AWD, existe una caja automática de seis velocidades con la modalidad de hacer los cambios de manera manual.
En la lista del equipamiento de seguridad Mazda CX-5 integra seis bolsas de aire (frontales, laterales y laterales tipo cortina con cobertura delantera y trasera), control de estabilidad, control de tracción y sistema de monitoreo de presión de llantas. Para las versiones tope de la gama existe cámara de visión trasera y sistema de monitoreo de punto ciego.
• El exterior está disponible en siete colores: aluminio, azul, blanco, gris, negro y dos tonos rojos.
• Tiene una longitud de 4,540 mm y un peso de 1,505 kilógramos.
• Equipa computadora de viaje con funciones de consumo de gasolina, contador de kilómetros, velocidad promedio y temperatura externa.
• Su capacidad de carga es de 928 litros y de 1,774 con los asientos abatidos.
• Todas las versiones cuentan con dirección asistida eléctricamente.